El segundo episodio de la gema de MTV regresó con menos fuerza. El tema principal fueron las mentiras, y el punto más destacado de éste semana: La participación especial de Ming y sus compañeras asiáticas. Si antes nos quejábamos de su ausencia, ahora podemos disfrutar su presencia. Otro punto central fue el trío amoroso, que poco a poco empieza a tomar forma. Jake está celoso por saber quien se acostó con Jenna, y ella se ve acorralada porque debe confesar antes que alguien más lo haga.

Todo empieza cuando es descubierta una cámara de seguridad grabando el santuario, aquel escondite bajo las graderías del colegio donde los muchachos hacen de las suyas, y eso incluyó a Matty y Jenna. De la noche a la mañana, los adolescentes se vuelven locos ya que sus secretos están por ser descubiertos y nadie quiere que el vídeo salga a la luz. Cuando Matty le confesó a Jenna que la amaba, otra línea borrosa se dibujó en su relación con Jake. Al fin de cuentas, más de un escándalo les salvó la vida, y hasta ahora, el secreto sigue escondido. ¿Deberíamos suponer que éste será el punto decisivo del triángulo amoroso? Dejaremos que los escritores dejen que la historia se queme a fuego lento, para que el final llegue como una bomba, lo cual será tan predecible como inesperado.

Continuamos con el misterio de la temporada, sobre el lector anónimo del blog de Jenna. No es tan sorprendente como parece, pero si Lacey escribió la carta, ni hablar de éste. Por fin, Lacey decidió contarle a Kevin, el padre de Jenna, sobre la carta. Ya no hay secretos en la familia, y seguramente Kevin va a molestarse mucho con su esposa por estropear la vida de su hija.
Los momentos de los asiáticos han sido sin duda lo mejor del capítulo... esos SÍ...(NO) SÍ... (NO) me han matado
ResponderEliminarCoincido con Sonia, lo mejor han sido los asiáticos... el triángulo amoroso me aburre mucho.
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