Los amigos de FOX, que vienen ya escaldados del despeñamiento mediático de Scream Queens, han decidido volver a la comedia tradicional. Vamos, hacerse un ABC y tirar de medias horas familiares. The Mick no es más que un pasito para atrás en el ya maltrecho slot de los martes, al que llevan años sin meter savia nueva y funcional.
The Mick trata sobre una mujer de mala vida y peores modales que tiene que mudarse a la mansión de su hermana cuando ésta se fuga del país por un delito financiero. ¿Qué se encuentra nuestra antiheroína Mackenzie? Una sorpresa sin precedentes: los sobrinos de la susodicha son un cuadro malcriado con cuyas desventuras va a tener que lidiar semana a semana. La penicilina vuelta a descubrir, vaya.
Vimos el piloto con ciertas expectativas. La protagonista, Kaitlin Olson, y el dúo creador habían trabajado juntos en una joya de la comedia irreverente como es It’s Always Sunny in Philadelphia (la cual aprovechamos para recomendar, por recomendar algo) y esperábamos algo remotamente similar. Las locuras que llevábamos viendo en Sunny durante 12 años no aparecen por ninguna parte. The Mick es una comedia altamente segura, family-friendly y, quitando un par de golpes más ácidos, un programa prácticamente blanco lleno de chiquilladas. Quiero ser ecologista, me han pegado en clase y voy a jugar con cerillas.
El estreno dominical del piloto y que esta misma noche continúe su emisión en la franja habitual del martes nos lleva a guardar cierta esperanza: si pretenden ustedes que le demos una segunda oportunidad a este festival del humor de clases, háganlo rápido para quitarnos este sabor de boca. No podemos decir que sea un mal sabor del todo. Llamémoslo ese vaso de agua que lleva más tiempo en la mesa del que te esperabas.
Con una protagonista bastante de manual que se desluce en un cold opening básico hasta decir basta y tres niños de los cuales sólo se puede salvar a uno de ellos por adorable, ¿existe algo medianamente proclive a generar carcajada? La asistenta. Ese siempre socorrido arquetipo de la latina salerosa que nos retrotrae a la un día maravillosa Raising Hope. Se puede afirmar con seguridad que The Mick es tan predecible que estaba claro que los secundarios tendrían que salvar el barco.
FOX tiene algo bueno, y es que al menos ya no permite risas enlatadas en sus series. Por todo lo demás, un piloto perfectamente noventero y chapado a la antigua. Vintage, si nos ponemos generosos. Una apuesta muy poco memorable que no llegará a hacer ruido, por mucho que queramos que nos corrijan en episodios venideros.
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