En Seattle sigue lloviendo, y este estreno doble de The Killing comienza con un formal detective Holder y su nuevo compañero investigando un nuevo homicidio. Una adolescente a sido violada y posteriormente apuñalada y degollada.
Linden, por su parte, ya no trabaja en la comisaria, sino que tiene un lío y vive recluida de la ciudad (no ha querido dejar el Estado de Washington, a pesar de que nada la retiene allí). Es entonces cuando Holden va en su busca: hace más de un año que no se ven, se mienten y hacen parecer sus vidas mejor de lo que realmente son. Sarah no parece dispuesta a colaborar con el detective, pero éste conoce el punto débil de su ex compañera y se dejará "olvidado" en casa de ésta el archivo del caso.
La trama se entrecruza con dos amigas adolescentes sin hogar que se sacan algo de dinero dedicándose a la prostitución, al igual que la víctima. Stephen no tardará en interrogarles en la calle pero no sacará nada en la primera toma de contacto.
Por otra parte tenemos a Ray Steward, asesino confeso de su mujer y padre del niño que en la anterior temporada pintaba árboles con el cual Linden había estado obsesionada, Le van a ejecutar en 20 días, pero Holder cree que puede ser inocente, ya que piensa que los asesinatos anteriores y el de la actual víctima están perpetrados por la misma persona y ésta no podría estar entre rejas. Sin embargo pronto nos damos cuenta de que Ray es un hombre perturbado al que le gusta matar cuando asesina al cura que le está intentando aliviar en el corredor de la muerte.
A medida que se desarrolla el capítulo vamos conociendo más las nuevas vidas de nuestros protagonistas pero también, y más interesante, a los secundarios que esta temporada van a estar cada capítulo, en especial a los adolescentes Bullet y Kallie y al asesino que va a ser ejecutado.
Ya en el segundo capítulo vemos cómo a pesar de la presión de su compañero, Holder no es capaz de dejar el caso y Linden no puede resistir la tentación de investigar por su cuenta. Además, tiene en casa antiguos archivos del caso que pueden estar relacionados. Como era de esperar, la pareja de detectives vuelve a estar unida para resolver un crimen.
Este episodio se centrará en el prisionero Ray Steward y las cosas que no cuadran en su caso. Sarah cree que él no fue quien asesinó a su mujer y decide ir a verlo a la prisión. Él le dirá entonces que no tiene ningún hijo. ¿Está mintiendo o realmente Adrian, el chaval que hacía los dibujos, no es hijo suyo?
Holder irá a investigar a la casa que le da nombre al primer episodio The Jungle, que es llevada por un sospechoso pastor. Se trata de un albergue religioso donde suelen dormir los adolescentes cuando consiguen camas. Además, conoceremos a una pareja de personajes más, el también sospechoso Twitch y a Lyric, la encantadora chiquilla que se deja manipular.
Por su parte Bullet se pasa todo el episodio intentando dar con Kallie, que está desaparecida. En su búsqueda es violada por otro personaje que creemos dará que hablar, el chulo que demuestra no tener escrúpulos y por lo que sabemos podría ser el asesino ya que no muestras contemplaciones con la chica. ¿Habrá sido violada y asesinada también Kallie?
El segundo capítulo ha sido algo más flojo y moderado que el primero, sin embargo la traca final es rotunda, Linden averigua por fin el lugar que representa los dibujos de Adrían, y cuando encuentra el sitio, en el bosque, se verá rodeada de al menos trece cuerpos ya descompuestos. Probablemente los verdaderos asesinatos de Ray Steward.
De nuevo y como siempre The Killing nos obsequia con una fotografía increíble, sigue siendo una serie oscura, de paisajes lluviosos y negruzcos pero con una calidad visual sublime, primeros planos que dejan entrever el interior de los personajes y una atmósfera de lo más inquietante.
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