Estos días nos han confirmado lo que ya hacía semanas que sabíamos: cancelan Smash. De nada han servido los cambios que han hecho. Y no deja de ser llamativo que parece que toda esta segunda temporada ha sido una crónica de una muerte anunciada: desdela separación de Tom y Julia hasta la muerte de Kyle. No sé a vosotros, pero a mi me ha dado esta sensación toda la temporada.
Como os comentaba, la muerte de Kyle en el capítulo anterior deja a Jimmy muy tocado, y parece que empieza a reaccionar y a dejar de hacer tonterías. Se ha centrado en el espectáculo –junto a Julia, quien le ayuda a hacer la transición –una vez que por fin han llegado a Broadway de la mano de Jerry Rand. Pero los teatros de Broadway son más grandes que los del Off-Broadway y conviene adaptar Hit List al nuevo espacio. Además, están todos preparándose y promocionándose para los Tony.
Derek, por su lado, sigue con sus líos de faldas. Así, si recordáis a Daisy –aquella bailarina que le denunció por acoso sexual y que luego retiró la denuncia–, en este episodio vemos con sorpresa que se ha incorporado a Hit List. En principio, en el coro, pero poco después, y con la excusa de dejar descansar a Ana, toma su rol de Diva. Con razón, Ana se teme lo peor. Y así es. Resulta que Daisy está chantajeando a Derek, con un vídeo que grabó sin que él se diese cuenta. Vamos, que el futuro profesional de Derek depende de un vídeo, por lo que opta por darle el papel de Diva a Daisy.
Derek, por su lado, sigue con sus líos de faldas. Así, si recordáis a Daisy –aquella bailarina que le denunció por acoso sexual y que luego retiró la denuncia–, en este episodio vemos con sorpresa que se ha incorporado a Hit List. En principio, en el coro, pero poco después, y con la excusa de dejar descansar a Ana, toma su rol de Diva. Con razón, Ana se teme lo peor. Y así es. Resulta que Daisy está chantajeando a Derek, con un vídeo que grabó sin que él se diese cuenta. Vamos, que el futuro profesional de Derek depende de un vídeo, por lo que opta por darle el papel de Diva a Daisy.
Eileen ha sacado la artillería pesada para promocionar Bombshell y está haciendo que Ivy esté presente en todos los actos. Será ella quien filtre a la prensa, haciendo creer a todo el mundo que ha sido su ex marido, que Tom y Julia se separan y le pide a Tom que prepare un concierto a modo de despedida –pero sin que él sea consciente de la filtración– y para promocionar Bombshell . Tom se esmera y prepara un número de cabaret en el que participan él mismo al piano, Ivy y, finalmente, también lo hace Julia, con quien canta a dúo.
Lo que parece no tener fin es la rivalidad entre Ivy y Karen. Cuando parece que hacen las paces, algo sucede para que se vuelvan a enfrentar. En este episodio, ambas habían llegado al acuerdo de comportarse correctamente ante la posibilidad de que alguna de las dos gane un Tony, hasta que aparece Ana y le hace un comentario sobre cómo se acostó con Derek para conseguir el papel de Marilyn, cosa que le sienta fatal y, como es normal, sabe que es Karen quien se lo ha explicado.Y vuelta a empezar con sus peleas.
El capítulo se acaba con una noticia bomba: Ivy está embarazada. Solo nos quedan 2 episodios –los cuales serán emitidos en un capítulo doble– para dar por acabada Smash e imagino que serán intensos. A pesar de que he sido muy crítica toda esta temporada, sí creo que, ya que acaba, debe hacerlo por todo lo alto. Los espectadores que nos ilusionamos con su piloto, y que la hemos acompañado durante estos dos años, nos lo merecemos.
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