Antes de empezar a ver el capítulo pensé que era un error haberlo emitido mientras todos veían (veíamos) la gala de los Globos de Oro; un suicidio para la continuidad de la trama. Pero tras ver este The Outsider, comprendo perfectamente el timing. Quitando el medio minuto final —que si coincidía con los anuncios de los premios, podía verse—, ha sido un episodio comodín, de esos rellenos que están bien pero tampoco echas de menos si lo importante te lo meten en una escena el capítulo siguiente.
Adoro a Emilie de Ravin, le tengo un cariño especial desde Roswell, pero esta semana como Bella no es que se haya lucido especialmente. Entre la aventura extra curricular de Bella y los detalles sin importancia —para mi gusto al menos— de la historia de cómo se conocieron Mulán y el Príncipe Felipe; si no hubiésemos pisado El Bosque Encantado esta semana no habría pasado nada. El único punto a favor es que la mención a Maléfica nos abre una puerta a una nueva aparición de Kristin Bauer.

Otro punto interesante es la idea, por fin germinante en la mente de los habitantes de Storybrooke, de dejar el pueblo y volver a su verdadero hogar. Llevamos desde que se rompió la maldición esperando este momento, ¿conseguirán volver y recuperar —y reconstruir— su reino? Por cierto, lo del Archie muerto no ha durado mucho; el verdadero psicólogo ya está libre.
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Me gustó el episodio, Mr Gold y hook se robaron el episodio, aunque al pobre Hook le pasó de todo, por lo de Belle su personaje no estuvo del todo mal en el episodio, pero sigue sin gustarme mucho.
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