Tras el divertido regreso de Castle en el capítulo anterior, la cosa se pone un poco más seria al retomar la archifamosa subtrama que inunda la serie: la conspiración sobre los asesinos de la madre de Beckett y el tiroteo que casi le cuesta la vida a la detective. Cruzando ya el ecuador de la temporada, todavía quedan bastantes incógnitas sin descifrar sobre este tema, y a pesar de que el capítulo no sea del todo revelador, sí que nacen nuevas preguntas. ¿Quién es el contacto desconocido de Castle? ¿Por qué está interesado en Beckett? ¿De dónde viene realmente todo esto?
Esperemos que poco a poco, las cartas se vayan poniendo sobre la mesa y los guionistas sepan darle una respuesta clara y coherente (en su justa manera) a todo esta trama, que incluso está tomando un giro político bastante interesante.
El capítulo esta vez se centra en la muerte de una exitosa profesora de universidad, que por causas desconocidas había roto con todo, y empezado a trabajar en una empresa de línea erótica. Cuál es la sorpresa de todos al descubrir que el coche en el que había aparecido muerta formaba parte de la flota de coches del alcalde.
A este punto del capítulo, ya se podía intuir que el choque de ideas entre Castle y Beckett era inevitable, dada la amistad que el escritor profesa hacia el alcalde. Pero las investigaciones rápidamente nos muestran que la cosa va más allá de lo imaginado, que no es la simple historia de un asesinato, sino una posible trama de malversación de fondos por parte de un alcalde que tiene intenciones de presentarse a gobernador.
Por si fuera poco, las evidencias apuntan a que el mismo alcalde pudo perpetrar el asesinato al enterarse que la víctima, Laura Cambridge, tenía constancia del dinero robado y su colaboración. Beckett se debate entonces entre contarle lo que sabe a su jefa y, en caso de no tener razón, arruinar la carrera del alcalde y además a Castle como compañero de faenas, o callarse y seguir investigando.
Por otro lado, Castle vuelve a recibir una llamada anónima sobre alguien que parece saber mucho sobre el caso y sobre la detective y que rápidamente abrirá los ojos de nuestro escritor.
En resumen, un capítulo interesante, que vuelve a sacar a la luz preguntas sin respuesta y que rompe un poco con la monotonía del tira afloja de Castle y Becket que últimamente estaba muy presente en la serie. Esperemos que lo que quede de temporada siga así y que pronto tengamos algunas respuestas.
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