Las 10 mejores comedias de 2021

Qué gran año para la comedia para seguir en la edición extendida de un apocalipsis, la verdad. A saber de dónde sacará el personal la inspiración para una cosecha tan selecta, pero la toma de decisiones sobre qué series incluir en la lista este año ha sido de todo menos fácil, y ya ni os cuento lo que ha costado ordenarlas.

10. Black Monday (Showtime)

Don Cheadle y los suyos no pierden forma. Para una tercera temporada, el nivel de las metralletas en esos diálogos no ha bajado el rango de munición. Black Monday mantiene el filo de esos cincuenta insultos por línea y se convierte en la cita anual del misterio ochentero de altos millones que necesitamos más que esta panda de hijos de puta necesita su kilos y kilos de coca. Una comedia muy basta pero vestida con una producción de presupuesto de Hollywood capital que sí permite a cualquier mona lucir toda la seda que se proponga.

9. What We Do in The Shadows (FX)

Otra tercera temporada que se ha convertido en un puntal imprescindible del género. Cero unidades de agotamiento han sido encontradas en la casa de los vampiros que Crepúsculo ya quisiera/debiera haber sido. Con la ventaja que dan los años para apoyarse en running gags y sus propias autorreferencias, han sido lo suficientemente inteligentes como para ampliar el círculo a secundarios más regulares de la talla de Kristen Schaal y dejar a los protagonistas ahondar más allá de la parodia, que siempre se agradece.

8. Search Party (HBO Max)

Obedear, bendita seas Dory entre todos los síndromes de Estocolmo. Un año más, Search Party da otro pasito adelante en los avernos de la trama criminal de estos millennials tan confusos que sólo son capaces de atacarse a sí mismos. El concepto de "comedia oscura" digievoluciona esta temporada poniendo a prueba a estos mataos con un tipo diferente de search party, más personal y más retorcida. El punto extra está en que no por ello resulta menos graciosa, y desde luego no menos brillante de lo que nos hizo enamorarnos de ella hace ya cinco años.

7. Made for Love (HBO Max)

Imagínate que Go*gle termina de invadirnos del todo y su CEO consigue digitalizar emociones y que te comas esas cookies. Imagínate que acaba siendo tu marido, vives secuestrada en un cubo deluxe y tu señor magnate de la tecnología quiere fusionar vuestras conciencias porque la megalomanía del varón blanco nunca pasa de moda ni conoce límites. Cristin Milioti, aka La Madre, consolidada como rostro de solvencia garantizada, se arrastra cual soldada Ryan por esta anti comedia romántica de alto concepto y aún más alto rendimiento del producto.

6. South Side (HBO Max)

Surrealista, estúpida y absurda, así es la vida en la zona sur de Chicago. El porqué de que una workplace comedy se divida entre un coche de policía y una tienda de muebles a partes iguales sigue siendo un misterio insondable de la televisión, pero se demuestra un claro acierto y una suma perfecta a esos tres calificativos iniciales. South Side pretende abarcar tanto el lado gracioso de las zonas más humildes de la ciudad que su segunda temporada se resume en esperar qué ida de olla de trama nos toca a continuación entre cambio y cambio de peluca de la Sargento Turner: el funeral de un relaciones de la noche, una invasión de payasos o una incursión en el mundo del teatro porque fuck you, en aquí cabe todo.

5. Miracle Workers (TBS)

Qué pesada J.K. con esclavizar a Harry otra vez, con lo entretenido que está aquí. Miracle Workers está consolidando la antología como una gran modalidad para la comedia de humilde presupuesto. Pese a ir desvirtuando su título casi tanto como Cougar Town a estas alturas de la película, esta temporada de Miracle Workers confirma que cuanto más rodaje le das a una comedia, no solamente no pierde frescura, sino que se lanza a llevar más y más al extremo tanto a personajes como situaciones. Total, si son de usar y tirar y el año que viene tenemos otros nuevos. Por Harry Potter cruzándose con Hedwig (pero la de la Angry Inch) en el Lejano Oeste, top 5 del año.

4. The Great (Hulu)

Ponme la mano aquí, Catalina mía. Tras mucho absurdo y mucho descabezamiento en el guion, pasamos a facturas palaciegas y cabezas que solamente ruedan por requisito de guillotina y costes de la guerra. Esta guerra no tan fría pero sí muy húmeda entre Elle Fanning y Nicholas Hoult se erige como una digna sucesora de The Favourite, con todo el permiso de Olivia Colman del mundo. Hilando tan fino como lo hace su equipo, no podemos evitar postrarnos a los pies de la sátira de la corte rusa más grande habida y por haber. Qué de juego da ese palacio y cómo se nota que no lo limpiaban ninguno de los dos.

3. The Sex Lives of College Girls (HBO Max)

Kaling, tía, lo has vuelto a hacer. Las College Girls en cuestión son un grupo de novatas de primero de carrera con su correspondiente mochilita de peculiaridades que se traducen en una nueva Sex and The City pero siendo The City el pavo de los 18. Son cuatro personalidades tan bien diseñadas y tan bien empastadas que, sumado al hecho de que los cuarenta chascarrillos por escena funcionan como un tiro uno detrás de otro, te hace sentir bien. Y no vamos a negar que estamos en un año jodidamente bueno para tirar de feel good content. Y también porque en la comedia romántica ya no hay que querer al maromo de turno, hay que enamorarse de tu amiga la de al lado.

2. Succession (HBO)

Es de mala educación ser básicos y ponerla número uno, pero también muy negligente negarle menos categoría. Sí, Succession es todo lo buena que infla el hype, se corrobora, se asume, se garantiza. Esas páginas llenas de puñaladas verbales entre familia están tan brillantemente construidas que, pese a quien pese, vive a la altura de dos años de expectativas. La pugna de los Roy por el control, descontrol, absorción, declive y resurrección de su imperio, todo a la vez, ha parido una temporada de 10 a la que no se le puede sacar más pero que lo trapero de ese cliffhanger. Más cruel que tener a Logan Roy de padre.

1. The Other Two (HBO Max)

Otra larga espera de dos años que ha merecido la pena con creces. La heredera natural y gloriosa de Difficult People se atreve con sacar a los protagonistas de una serie de losers de manual de la inmundicia vital para darles éxito, solo para que se revuelquen en su decadencia aún más. Los dos hermanos mayores de un niño estrellita ahora son hijos también de la reina de las mañanas. Y, contra todo pronóstico, sus proyectos de ser mánagers y actores de rango medio... salen casi bien. O al menos lo suficientemente bien para darles nuevos campos de juego en los que ejercer su carga referencial medida en kilotones. Porque The Other Two es la cultura pop hecha comedia y si estás leyendo esto desde Twitter, es un crimen que no seas fan aún.