Hace unos meses, sin hacer mucho ruido, Amazon Prime Video estrenaba Undone, una serie de animación creada por Kate Purdy y Raphael Bob-Waksberg (responsable de la obra animada BoJack Horseman, esta vez de Netflix). Para aquellos que vimos el tráiler en verano las expectativas eran altísimas. Yo me quedé con la boca abierta y, a día de hoy, sigo tal cual. Es una maravilla.
“Estoy harta de vivir”. Se podría decir que ese es el lema de Alma, la protagonista. Suena el despertador, abre el grifo de la ducha, se viste, conduce hasta el trabajo, va a la compra, cena, se mete en la cama y vuelve a apagar el despertador. Tiene 28 años y la monotonía se ha apoderado de su vida. Antes de poder poner remedio, sufre un accidente de coche provocado por la supuesta visión de su padre, muerto desde hace unos años. Justo antes del impacto, los creadores ya nos estaban avisando de lo que iba a venir. Lo hacen con dos carteles donde se indican las palabras “Real” y “Crash”. Después, llega el “boom” y la serie detona.
Una de las primeras preguntas que surgen al empezar a ver Undone es por qué han utilizado la animación para contar la historia de Alma. La respuesta es sencilla: la trama implica una historia más allá, literalmente: la de su padre fallecido. El director Hisko Hulsing lo tuvo claro al leer el guion: tenían que montar la serie a partir del método llamado rotoscopia. Este consiste en dibujar cada fotograma sobre el vídeo original para conseguir naturalidad del movimiento y de las expresiones. Esto les daba mayor libertad de presupuesto y creación. El resultado es magnífico. Si todavía no has tenido oportunidad de verla es el momento de ponerse a ello, porque a partir de aquí esto se pone todavía más interesante y se vislumbran spoilers...
Tras el accidente, Alma empieza a alucinar: ve a su padre muerto desde hace años, este le pide que le ayude a resolver su propio asesinato y, además, le enseña a controlar el tiempo. Un momento... entonces, ¿todo lo que estamos viendo es real o es una fantasía provocada por el trauma de la protagonista?
La duda se apodera de nosotros. Pero ¡qué duda tan maravillosa! Al igual que Alma, nos moveremos durante ocho episodios entre el mundo terrenal y uno más lejano. Que sea una ilusión, imágenes provocadas por un traumatismo o el síntoma de un principio de esquizofrenia es lo de menos.
Y, aunque muchos lo han cuestionado, tampoco importa si la animación favorece o no a la trama, porque Undone es mucho más. Es un viaje entre lo conocido y lo que no nos atrevemos a descubrir. Es una inmersión en el campo de la salud mental. Es un juego que nos hace reflexionar y disfrutar al mismo tiempo. Y, sin duda, es una obra de arte, que ya tengo en mi lista personal de mejores series de la historia.
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