Ponemos el broche final a la temporada de listas recopilatorias haciendo una parada en las series dramáticas del año. Esas series que, semana a semana o en buenos atracones gracias a las plataformas streaming, nos dejan con un nudo en el estómago, nos hacen sufrir, nos hacen pensar y nos dejan vivir en cierto modo el dolor y las aventuras de sus personajes.
Este año nos encontramos mucha novedades en la lista, ventajas, quizás, de que grandes series como Game of Thrones, Stranger Things o Big Little Lies hayan descansado durante 2018. Pero no os preocupéis porque material para cubrir los 10 puestos (y algunos más) hay de sobra. Adaptaciones literarias, miniseries, series antológicas, series nuevas y alguna que consigue repetir. ¿Cuáles son las mejores series de drama de 2018?
10. The Handmaid's Tale
El año pasado la pequeña gran joya de Hulu entró con fuerza en el panorama televisivo llevándose sus primeros galardones. En nuestras particular lista, se impuso a Big Little Lies como mejor serie dramática. Esta segunda entrega, en cambio, ha podido arañar alguna nominación en el apartado interpretativo, que es donde mejor se desenvuelve.
La serie no se ha vuelto mala, ni mucho menos. Simplemente esta segunda entrega, con mayor libertad creativa, al no tener que beber del libro en el que se basa, se queda a medio camino. Los momentos duros que siguen viviendo las mujeres de Gilead pecan a veces de excesivos. Muy rebuscados, quizás. Como si tuviesen que ser por obligación peores que los vividos en la primera temporada porque creen que eso es lo que la audiencia busca. Eso sí, la serie sigue siendo digna merecedora de entrar en la lista de los mejores dramas del año, sobre todo por regalarnos la maravillosa evolución de Serena.
9. Pose
Pose es excéntrica, es baile, es llamativa, es color, es representación del colectivo LGTBQ+ y es todo a lo que Ryan Murphy nos tiene acostumbrados y más. La serie presenta personajes oprimidos por su sexualidad, su género o su raza pero que no se hunden en sus problemas; se unen, luchan, no se callan.
Personajes interpretados por un elenco que proviene de las mismas minorías oprimidas a las que dan voz y luz en Pose. Y no todo son dramas en esta ficción, también hay mucho hueco para el glamour, la música, el baile y mucho mucho brillo.
8. The Assassination of Gianni Versace
El relato que presenta Ryan Murphy del asesinato de Gianni Versace es engañoso, sobre todo si te acercabas a esta serie por la historia del diseñador y por ver a la siempre solvente Penélope Cruz interpretando a Donatella. La serie se posa sobre un personaje menos conocido pero de igual importancia, o mayor, que la del propio Versace.
La historia que nos vende Darren Criss, interpretando al asesino en serie que acabó con la vida de Gianni, es sorprendente. La locura, la soledad, el ansia de poder, la agresividad y los celos son algunos de los matices que nos brinda uno de los actores televisivos y uno de los personajes del año.
7. Bodyguard
La serie de Richard Madden ha conseguido batir todos los récords de audiencia en la BBC y claramente es por algo. La historia narra cómo David Budd, veterano de guerra, es colocado como guardaespaldas de una influyente política interpretada por Keeley Hawes.
La serie consigue equilibrar los momentos de acción con los momentos de tensión de dos negociaciones que te dejan apretando los dientes intentando anticipar qué va ocurrir y se apoya en dos temas de actualidad como son el conflicto yihadista y la corrupción de las instituciones. Y todo esto, condensado en tan sólo 6 episodios. La especialidad de la BBC de construir relatos sin necesidad de alargarse en exceso para poder cumplir con su historia y con sus personajes nos deja con un drama en el que la acción no cesa sin dejarse olvidado el diálogo. Pos si fuese poco, David Budd le ha valido una nominación a Richard Madden a los Golden Globes. Me sé de uno que no será el "King in the North" mucho más tiempo.
6. Homecoming
Amazon Video se anota un tanto al apostar por Homecoming. Este thriller psicológico, protagonizado por la mismísima Julia Roberts, cuenta la historia de Heidi Bergman, una terapeuta de un programa que ofrece atención psicológica a soldados de guerra con estrés postraumático. El catalizador de la trama es Walter Cruz, uno de los soldados.
Este drama nos lleva del pasado al presente con un cuidado cambio al presentarnos las dos líneas temporales mientras descubrimos lo que sucedía entre las sesiones, lo que ocurría a los pacientes mientras convivían y lo que ha pasado para entender por qué Heidi es ahora camarera.
Homecoming se ha hecho un hueco entre los dramas del año y Julia Roberts se gana halagos con su interpretación. Ah, y consiguen todo esto en episodios dramáticos de treinta minutos de duración.
5. Killing Eve
Este thriller nos relata la historia de Villanelle, una asesina a sueldo, y Eve Polastri, una agente del MI5 impulsiva y poco amiga de las reglas que la persigue. Phoebe Waller-Bridge (Crashing, Fleabag) consigue que Killing Eve, que se basa en las novelas de Luke Jennings, tenga su característico toque. Y construye a dos personajes femeninos complejos y que se complementan.
Killing Eve presenta un tema recurrente en la ficción televisiva. Los thrillers policíacos son más numerosos que los dramas médicos, pero consigue darle un punto de vista femenino, más cuidado y un enfoque al que no estamos acostumbrados cuando nos enfrentamos a dramas de este tipo. La serie consigue sorprendernos con algo que creíamos conocer.
Además, las interpretaciones de Jodie Comer y Sandra Oh están a la altura de un thriller dramático realmente prometedor, aunque es cierto que Oh está un poco por encima de su coprotagonista.
4. L'Amica Geniale
La amiga estupenda, como se la conoce en España, muestra la historia de la amistad de dos mujeres: Lila y Lenù. A lo largo de los años, y con cambio de actrices obligatorio, muestran cómo la relación de estas dos amigas cambia y las cambia a través de los celos, la competitividad y su fidelidad.
Las dos niñas comienzan su amistad empujadas por los estudios, por su ansia de crecer y su talento capaces de hacer frente a los estigmas y a los estereotipos de la machista Italia de los años 20. Ambas revolucionan su colegio, revolucionan a sus familias y a todo cuanto tocan.
La serie, además, ha hecho un trabajo de casting magnífico. Cada par de actrices que interpretan a Lila y Lenù consiguen mantener un nivel altísimo de interpretación que nos ayuda a recibir los cambios con mayor facilidad y hace más orgánica la continuidad del relato. Por si fuese poco, la serie se basa en la tetralogía de la escritora Elena Ferrante, por lo que podremos disfrutar de las vidas de las amigas durante un poquito más.
3. The Haunting of Hill House
¿Quién nos iba a decir que una serie de terror iba a terminar por colarse en la listas de lo mejor del año? Y no sólo una serie de terror cualquiera, una serie ambientada en una casa encantada. Plagada de fantasmas y de momentos que nos podrían resultar repetitivos o poco originales. Pero de eso nada, The Haunting of Hill House consigue mantener la tensión y el suspense a lo largo de los diez episodios que conforman la primera temporada.
La forma de relatar la historia, a través del punto de vista de cada uno de los hermanos, nos permite conocerles mejor y ver un mismo mundo con distintos ojos. Desde el escéptico hasta los más traumatizados. El sexto episodio, Two Storms, filmado en cinco planos secuencia deja ver la calidad técnica de la producción y nos deja uno de los episodios del año. Y si fuese poco, se las han ingeniado para sorprender con giros de guion que hacían inevitable seguir viéndola. Por todas esas razones, es la tercera mejor serie dramática del año.
2. Sharp Objects
Sharp Objects es una adaptación casi perfecta de la obra homónima de Gillian Flynn. La historia nos lleva de vuelta a Wind Gap de la mano de Camille, una joven periodista que acabó "huyendo" de su ciudad natal, un pueblo claustrofóbico en el que se espera que las mujeres sean seres perfectamente sumisos ante una sociedad claramente dominada por los hombres. Un mundo que le quedaba pequeño a la periodista y al que se ve obligada a volver para investigar el asesinato de dos niñas.
Con su regreso, resurgirán los recuerdos de su pasado. Una infancia marcada, como su cuerpo, por la violencia, los cuidados excesivos de su madre y al muerte de su hermana pequeña. Las tres protagonistas, Camille, Amma y Adora brillan de una forma espectacular. Tres personalidades opuestas y que juntas romper cualquier estereotipo de género que pudiesen tener en Wind Gap. Las mujeres pueden ser libres, pueden ser independientes y pueden ser lo suficientemente fuertes como para aterrorizar a un pueblo entero. ¿Necesitamos más razones para premiar a esta maravilla de la HBO? Nosotros creemos que no.
1. The Americans
The Americans pone el punto y final a su andadura con una temporada impecable. El siempre desapercibido drama soviético había sido un cocedero de tensiones que reventaron en su recta final de la manera más demoledora posible, y es su desenlace el motivo por el que corona nuestra lista de lo mejor de 2018.
Los Jennings superan con nota las expectativas que teníamos sobre cómo se cierra la historia de dos personajes con tantos frentes abiertos. El bélico por fin enfrentaba a Elizabeth y Philip sin máscaras contra Stan en plena huida con el botón de autodestrucción entre los dedos. El familiar nos rompía el corazón con la bajada del tren de Paige. Y el romántico llevaba a nuestros aproximadamente héroes por fin a la madre patria, intactos respecto a la sangre, bastante más maltrechos en cuanto a sus identidades.
Los Jennings superan con nota las expectativas que teníamos sobre cómo se cierra la historia de dos personajes con tantos frentes abiertos. El bélico por fin enfrentaba a Elizabeth y Philip sin máscaras contra Stan en plena huida con el botón de autodestrucción entre los dedos. El familiar nos rompía el corazón con la bajada del tren de Paige. Y el romántico llevaba a nuestros aproximadamente héroes por fin a la madre patria, intactos respecto a la sangre, bastante más maltrechos en cuanto a sus identidades.
COMENTARIOS