La apuesta paranormal que FOX ha hecho para hacer compañía a su bloque de animación los domingos tiene, ante todo, potencial. Es un proyecto cuyos ingredientes pueden dar muy buen resultado una vez consigan encontrar su ritmo y su equilibrio. Además, cuenta con una forma y un argumento que en ocasiones pueden recordar a Los Cazafantasmas o a Scooby Doo, por lo que puede tener más fácil enganchar a los seguidores de esos clásicos.
El elenco no es muy extenso pero eso no tiene por qué ser un problema. Toda procedimental que se precie suele mantenerse gracias a la química entre los dos personajes principales que comparten batallas, y el dúo formado por Leroy Wright (Craig Robinson, The Office) y Max Jennifer (Adam Scott, Parks and Recreation) funciona a la perfección. Sólo echo de menos que uno de ellos sea una mujer, no por la trama obligada romántica sino porque, como Rashida Jones ha demostrado en Angie Tribecca, este tipo de humor también es apto para una líder femenina. También pecan un poco de repetitivos; la dinámica de cerebrito torpe y hombre fuerte y resolutivo está muy manida pero su compenetración es irreprochable, además, es casi imposible no recordar sus pasados roles como Darryl y Ben Wyatt porque sus personalidades son bastante similares.
La premisa de la serie es muy simple: Uno de los mejores detectives de la policía se encuentra trabajando como seguridad en un centro comercial porque en una de sus misiones uno de sus compañeros murió por su decisión de no esperar por refuerzos; a su vez, un inteligente profesor universitario con sorprendentes teorías sobre lo extraterrestre es tomado por loco y ahora trabaja en una librería. Pero sus habilidades y sus conocimientos no pasan desapercibidos ante los ojos de Ava Lafrey (Ally Walker, Sons of Anarchy), capitana de la Bureau que les pide una ayuda puntual (posteriormente permanente). Completan el equipo Annie (Amber Stevens West, Greek) y Barry Shaw (Adeel Akhart, Utopia), tres personajes que, de momento, se caracterizan por ser básicos y planos; Jefa fría y distante, chica guapa y simpática que les ayuda en sus misiones y científico excéntrico.
Es una serie que puede dar juego porque, aunque parece que pueda seguir con el hilo conductor de las abducciones, eso no quita para que los nuevos fichajes del grupo Bureau puedan hacerse cargo de otras peligrosísimas criaturas de vez en cuando. En el segundo episodio de la primera temporada ya nos han regalado un precipitado capitulo de Halloween (que por la pinta debería haber sido el cuarto) en el que la amenaza principal era un pequeño gato capaz de convertir a la gente a la que arañaba o mordía en auténticos zombies. Si logran mantener los casos igual de disparatados sin caer en lo manido y repetitivo, pueden contar con una vida larga.
COMENTARIOS