Lo que parecía que iba a ser un episodio terrorífico se quedó en un par de sustos, alguna imagen poco agradable y mucha acción, pero oye, nosotros que lo agradecemos. El nivel de la serie ha vuelto a su cauce esta semana, con el valor añadido de haber podido ver a Kara borracha. Desde aquí alzamos una petición a The CW para que deje a Kara desmelenarse con más frecuencia, porque los momentos que nos dejó bajo los efectos del alcohol en este episodio fueron breves pero hilarantes. Pero como no estamos aquí para pedir que la pobre muchacha se alcoholice, pasamos a hablar de los sucesos de esta semana, que no son pocos.
El peligro para nuestros héroes llega esta semana desde Noruega de la mano de un científico que aterrizaba en el DEO después de que sus compañeros fueran asesinados en extrañas circunstancias en el laboratorio en el que trabajaban. La culpa de todo la tiene un alienígena parásito alojado en el propio científico que se alimenta extrayendo la energía de aquellos con los que tiene contacto, incluyendo alienígenas. Por desgracia, J’onn J’onzz y Supergirl no lo descubrieron hasta que fue demasiado tarde, quedando bastante maltrechos por el camino. Kara es una chica fuerte y con un par de lámparas solares se quedó como una rosa, pero lo de J’onn J’onzz fue otro cantar; le hacía falta una transfusión urgente para poder vivir, así que acudieron a M'gann M'orzz que fue bastante reticente con el tema por el pequeñísimo detalle de que pertenecen a especies enemigas, aunque ambos sean marcianos. Solo el futuro dirá si la sangre donada tendrá repercusiones negativas para J’onn.
Por otra parte James Olsen sigue en sus trece y quiere ser el nuevo justiciero de la ciudad, pero no puede hacerlo él solo. Necesita de la inestimable ayuda de Winn como mano derecha que lo asista, mantenga informado de los crímenes en la ciudad y le confeccione un traje con el que poder luchar. Y le agradece su inestimable ayuda tratándolo como si Winn solo estuviera en el planeta para obedecer sus órdenes a la mayor brevedad posible. James, ser un soso es una cosa, pero ser un imbécil con la única persona que te ayuda es otra muy diferente. Finalmente, James salió a la ciudad bajo el nombre de Guardian con un traje de batalla que parece hacer todo el trabajo difícil por él y un look con el que bien se podría hacer pasar por un primo hermano de Spartacus en Arrow. Ahora James y Winn se hacen llamar los Super Friends y la pereza por su trama va en aumento.
Alex Danvers sigue siendo la protagonista absoluta de la serie cuando hablamos del plano sentimental, y es que la pobre mujer tuvo unos días de los más moviditos. Aconsejada por Maggie empezó la nueva etapa de su vida saliendo del armario con Kara, lo que nos dejó unas cuantas escenas entrañables entre las hermanas. No fue una salida del armario feliz y llena de fuegos artificiales, sino una bastante más realista de lo que acostumbramos a ver por estos lares, llena de dudas, inseguridades, pasos atrás y llanto. Una vez en paz consigo misma, Alex se tiró a la piscina y por fin besó a Maggie, que la envió a la friendzone con una de sus encantadoras sonrisas. Nos encanta que no edulcoren el proceso por el que está pasando el personaje, aunque estamos deseando ver a Alex feliz con Maggie. Porque sí, seguimos teniendo esperanzas puestas en esa pareja, de la friendzone también se sale.
Por último pero no menos importante, Mon-El acaba de descubrir que lo de ayudar a la gente no se le da tan mal (después de haber estado haciendo de matón a sueldo por la ciudad). Pero cometió el error de prestar esa ayuda sin ningún elemento que ocultara su identidad, dejándolo a merced de cualquier persona malintencionada de National City. Cadmus no tardó en aprovechar esta oportunidad para llevárselo secuestrado a sus instalaciones. ¿Por fin veremos sobre la mesa las cartas de Cadmus la semana que viene?
Promo: 2x07 The Darkest Places
COMENTARIOS