5 razones para ver 'Mom'

Parece como si fuera ayer cuando se estrenó una de las series más desapercibidas de la televisión americana. Mom entró a nuestras vidas en 2013 y tres temporadas después se ha convertido, sin duda alguna, en una sitcom memorable. Su cuarta temporada regresa con Allison Janney y Anna Faris llevando de nuevo la batuta de un elenco formado por unas actrices secundarias dignas de mención. La serie protagonizada por Bonnie y Christy se tiene que ver y en TV Spoiler Alert te contamos por qué.

1. El drama hecho comedia

Si por algo es reconocida Mom es por la manera en la que enfoca la narrativa trágica de cada uno de sus personajes.

La temática de la serie gira en torno a la superación de una adicción de una manera poco antes vista: con buen y cursi humor. Las idas y venidas de los personajes de Mom, cualquier decisión que tomen o cualquier estado emocional en el que se hallen acaban teniendo relación con su condición de alcohólicas. A lo largo de las tres temporadas, los personajes de Allison Janney y Anna Faris luchan contra el deseo de volver a decaer en el alcohol y sobrellevar problemas que, a pesar de pertenecer a una sitcom, no son de una naturaleza propiamente cómica.

Y no están solas, los demás personajes que aparecen en el show también deben superar sino problemas de adicción, conflictos que tampoco cuentan con una esencia graciosa: embarazos prematuros, blanqueo de dinero, soledad, malas relaciones familiares…  Y la manera en la que la serie de Chuck Lorre trata cada conflicto dramático es casi magistral por cómo la transmite al espectador y cómo lo interioriza directamente con cada personaje. Sin olvidar claro que son personas que han metido la pata hasta el fondo, que han fallado a sus seres queridos y que han hecho cosas que a muchos no les pasaría ni por la cabeza llevarlas a cabo, pero el espectador lo sabe, quiere a los personajes y empatiza con ellos.

Se encuentran en una constante cuerda floja y para avanzar en cualquier aspecto de su vida, aspectos que a una persona les podrían resultar totalmente corrientes, necesitan primera situarse en un terreno estable en relación con el alcohol y para poder superarlo, tienen que contar las unas con las otras.

2. Una representación verdadera del personaje femenino

Y es que al fin y al cabo, quienes se quedan juntas siempre son el grupo de mujeres inseparables: Christy, Bonnie, Marjorie, Wendy y Jill. Mom relata el proceso de envejecer sin complejos ni tapaduras, personajes mayores (y no tan mayores) que vuelven a reinventarse o a tomar las riendas de sus vidas para olvidar el pasado, cosa que aparte de Grace and Frankie no se suele ver por estos lares. Narra los problemas vistos desde el más sincero punto de vista femenino, sin tapujos a la hora de hablar sobre cualquier tema y con una confianza que pone al espectador en un entorno bastante cómodo.

En una industria donde gran parte considera a la mujer como un mero objetivo a merced del personaje masculino, Mom está protagonizada por mujeres, trata sobre mujeres y enfoca esta trama de cara a el verdadero concepto de mujeres.

Un ejemplo claro es la manera en la que tratan el sexo en la serie. En las primeras temporadas, la sexualidad de Christy era un tema que solía salir a escena sin la necesidad de emplear bromas que incluyesen los órganos genitales femeninos o la mera y gratuita alusión a ellos. Recibió un consolador de parte de su madre y hace bromas sobre la masturbación pero no como tema que se use para enganchar al público masculino, ni siquiera para levantar morbo. Se habla de él porque es un tópico común  en la vida de gran parte de la población mundial y lo tratan sin que la vida del personaje gire en torno a él o la defina mismamente.

La vida sexual de Bonnie también es un ejemplo claro de la libertad con la que se mueven los personajes en la serie. Una mujer segura de su atractivo y de su físico a la que no le importa ligar con hombres de su edad, o más jóvenes incluso, y que no queda determinada por ello. La concepción que el espectador llega a tener de Bonnie se aleja totalmente de una idea despectiva en referencia a su actividad sexual. ¿Por qué? Porque es una necesidad básica, que no se debe tratar con tabúes o con características que presenten a un personaje de manera peyorativa solo por ser del género femenino.

3.  Allison Janney

Quien antaño formó parte de The West Wing es actualmente una de las actrices más queridas del panorama cultural estadounidense. Allison Janney es una de las actrices más versátiles de la industria actual y los dos Primmetime Emmy que se ha llevado por su interpretación de Bonnie Plunkett demuestran lo bien que le sienta protagonizar su propia serie.

Sin duda Janney pertenece a esa larga lista de buenas actrices que, al encontrar únicamente papeles secundarios en el cine, se pasan a la industria televisiva para poder emplear correctamente su potencial. Bonnie representa la más pura esperanza y las segundas oportunidades al volver a formar parte de la vida de su hija. La libertad que su personaje evoca refleja la necesidad de hablar de ciertos temas que muchos consideran tabúes por el mero hecho de pertenecer o a la vida sexual femenina o al proceso de envejecimiento. 

Sin duda la construcción dramática del personaje ha ido mejorando con el paso de los años y ya cuenta con su propia naturaleza entrañable. Todo lo que significa el papel de Allison Janney es más que necesario en una industria que todavía se divide por el sexismo y el veto de ciertas temáticas.

4. El elenco

Allison Janney se merece todos los Emmys que tiene y más. La actriz lidera un elenco de cinco estrellas y, por mucho que cueste, no solo brilla ella. Anna Faris es una actriz a la que se solía relacionar directamente con la saga de Scary Movie pero que, al protagonizar su propia serie muestra las cualidades interpretativas que puede llegar a tener. A pesar de que no atiborra la pantalla de talento, sí que se la ve muchísimo mejor aprovechada en esta serie que en trabajos anteriores. Pero no se puede decir lo mismo de Jaime Pressly. La actriz que interpreta a Jill Kendall en Mom ya era conocida por haber hecho de Joy en My name is Earl, papel que le otorgó un Emmy a Mejor Actriz Secundaria en Comedia, y en su papel actual la chica se sale. Sin duda hay actrices que están hechas para la comedia y Pressly es una de ellas. El personaje de Jill es bastante simple, la típica rica tonta, pero junto a los diálogos que le dan los guionistas y el toque propio de Pressly la hacen sin duda en un personaje único y desternillante.

La química que hay en los actores de una serie multi-cámara como es Mom es indispensable a la hora de triunfar, por ello la calidad prima a la hora de elegir el cast y en cada capítulo se nota el nivel que hay entre el elenco.  Mimi Kennedy y Beth Hall cierran el reparto secundario, ambas clavando sus interpretaciones y le otorgándole un toque único a Marjorie y Wendy.

5. Las risas

Porque el drama siempre viene bien pero la comedia expresa lo malo y deprimente de una manera graciosa y liberadora. Mom pone en práctica unos recursos narrativos impresionantes con sus diálogos y sus gags y recrea todo lo triste en un escenario puramente cómico y bastante entrañable. No solo ingenia buenas maneras de poder tratar temas trágicos sino que el guion de cada capítulo (firmado en gran mayoría por Gemma Baker, Eddie Gorodetsky y Chuck Lorre) cuenta con diálogos de primera que realmente hacen reír, en los que no hay necesidad de buscarle la gracia a nada (que tampoco está de más hacerlo) porque los personajes te lo ponen en bandeja y se nutren de ello.

Cada situación evoca de por sí una sonrisa en la cara del espectador y si además se le busca el significado a cada historia la serie no hace más que mejorar. 

La cuarta temporada promete estabilizar (o no) la balanza amorosa de Bonnie con William Fichtner siendo regular y también alegrar a los shippers de Anna Faris y Chris Pratt al tener una aparición confirmada del actor, sobre todo si será un interés amoroso para nuestra Christy. Por eso os recomendamos ser seguidores de ella desde ya en Neox y TNT donde van de la mano con la emisión en territorio americano.