Este episodio os lo puedo resumir de la siguiente forma: el mundo carpetero difícilmente se recuperará de los acontecimientos de este capítulo, Emily no está enferma, las liars vuelven a encubrir y arruinarse la vida, sabemos más del 'A' de 2016 y sabemos cómo Sara se quemó las manos. Creo que este es un buen comienzo.
Empecemos la casa desde abajo, no por el tejado como Marlene King hace cinco temporadas. Lucas vuelve a Rosewood con el aire teenager-maduro que nunca tuvo en el instituto, empresario que ya ha cerrado una empresa y ahora se dedica a crear aplicaciones de juegos. 5 años pueden dar para mucho y este lo ha extendido como un chicle.
Terremoto en el mundo carpetero
No quise ser ave de mal agüero en mis artículos anteriores, pero el flirteo entre estos dos se veía venir. Hablo de Spencer y Caleb. Melissa también lo pensaba y cuando se lo hace saber a su hermana, añade: "sé que te gusta coger cosas de los carritos de los demás". Es una forma sutil de recordar que una debilidad de Spencer eran los novios de Melissa, Ian y Wren concretamente. La hermana mayor sigue teniendo la misma sangre fría y cinismo de siempre.
Spencer siempre se ha caracterizado por ser el personaje más directo de la serie y esta vez no iba a ser menos. Le confiesa a Hanna sus sentimientos por Caleb y esta le deja el camino abierto. La noche de amor no se hace esperar y el sofá de Spencer es testigo. Y nosotros. El mundo carpetero está ahora mismo patas arriba y dudo que alguna vez vuelva a ponerse derecho. Analicemos la situación: la atracción de Spencer por Caleb y la correspondencia de este quiere decir que no volveremos a ver, al menos en un futuro próximo, a Spencer-Toby o Hanna-Caleb. Y si lo vemos, ya no volverá a ser lo mismo. Todos fuimos Keegan Allen.
Los problemas de Emily
Estos se pueden resumir en tres: su madre se entera de que nunca llegó a graduarse, Sara la acosa y Hanna la descubre pinchándose. No es el mejor capítulo para Emily. Lo mejor de la escena es cuando la madre le pregunta acerca de una foto que esta tiene con el birrete de graduada, una imagen que le envió para alimentar más la vida paralela que solo estaba en su imaginario. "¿De los chinos?", le pregunta su madre, y nosotros también.
Los birretes de los chinos están "curraos" |
Sobre la supuesta enfermedad que parecía tener, se confirma que solo se encuentra en proceso de donar sus óvulos para ganar dinero. Es un punto interesante dentro de la trama que traslada la realidad de muchas personas actualmente en la vida real a la pequeña pantalla, haciéndole hueco en el guion, indirectamente, tanto a esas parejas que no pueden tener hijos y recurren a diversos métodos, como a todo aquel que los utiliza para subsistir como hace Emily, lo queramos asumir o no.
En cuanto a Sara, se convierte en la sombra de la nadadora durante todo el capítulo. Gracias a lo cual descubrimos que por culpa de la bofetada de Emily en la midseason finale, esta se electrocutó las manos al intentar incorporarse del suelo, de ahí la quemadura que la rubia sufre en las manos.
Dèjá vu teenager y el 'A' de los nuevos tiempos
Recordemos que Hanna borró las imágenes del restaurante psiquiátrico Radley de su madre en las que se veía a Aria y Ezra saliendo del hotel la noche de la muerte de Charlotte. La policía descubre que fueron borradas y los interrogatorios vuelven. Hanna, para evitar que la culpa recaiga sobre alguna de las liars, le pide a Lucas que se convierta en su coartada y finja haber pasado aquella noche con ellas en su habitación.
Por otro lado, Aria recibe un SMS anónimo culpándola de saber quién mató a Charlotte y amenazando con que la obligará a confesarlo. Al menos sabemos que el nuevo acosador/a sigue utilizando los SMS y no se ha pasado al WhatsApp o Telegram. Las tradiciones son las tradiciones.
El 'A' de 2016 no irá de negro o, al menos, no con el chándal descolorido con el que se ha tirado un lustro acosando a las chicas. Lo sabemos porque lo arroja a la basura y teclea en Google "Uniforms". Veamos qué se encontró el 'A' moderno con esta búsqueda.
Como vemos, 'A' podría acosar con distintos uniformes. ¿Serán acosadas las chicas por un obrero? ¿Piloto de avión? ¿Electricista? ¿Médico? ¿Cocinero? ¿Niño de San Ildefonso? Lo veremos en los próximos episodios.
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