Un discurso pidiendo perdón a las familias, eso es lo que obtenemos tras los más que destacados acontecimientos de la semana pasada. Fitz podría estar enfadado con Olivia por dejarle plantado casi en el altar, pero qué más da, si los congresistas acaban de huir con el rabo entre las piernas. Incluso ella se sorprende de la reacción del presi, pero le apetece complicar más las cosas fingiendo no saber que su padre ya no está en prisión. Que Rowan no aparezca es estupendo, pero la ausencia de Mellie es vergonzosa y lamentable. Espero que se esté cocinando algo gordo. También le podemos cargar el muerto, nunca mejor dicho, del asesinato de Elise. Estaba claro que no iba a ser un camino fácil el de Fitz & Liv, pero quién se iba a imaginar que sería ella la que sabotease todo el asunto. #MalditaShonda. Esto es una cosa seria, desde la semana pasada Olivia está empezando a caerme muy mal. Aunque, para ser sincero, desaparece mi animadversión en cuanto se pone a trabajar.
No entiendo muy bien por qué estaba Michelle Obama en el acto de entrega de la Medalla de la Libertad. Este mundo paralelo es extraño. En fin. En dicho acto se va a condecorar a un violador, cómo no. Cuidado, Shonda, te encasillas con las tramas episódicas y yo estoy demasiado sensible para dejarlo pasar. Aunque, por ser justos, es un tema a la orden del día y, de hecho, recuerda al caso de Bill Cosby. Primero Lady Di y ahora esto. Luego viene el toque Shonda, que consiste en desvelar que la esposa lo sabe todo y controla al señor como a un perrito. El mundo ha cambiado mucho en los últimos cuarenta años. El matrimonio, no tanto. También la forma de denunciarlo ha sido única. Podría servir como ejemplo en el futuro. Ha sido un episodio de lo más procedimental.
Huck y Quinn siguen siendo random. Me pregunto cómo funciona la cabeza de un guionista que decide introducir un nuevo miembro en el equipo de gladiadores cuando ya tiene a dos, completamente olvidados, a quienes podría dar un toquecito, o una reforma general. Nada que ver con Abby, que cada día crece más por sí sola y en su relación con Olivia. Cyrus, por su parte, admite estar celoso de Liv porque ahora ella es la POTUS, algo así como la reina regente. Lo es. Cyrus rara vez se equivoca. ¿Creéis que, como si se tratase del giro final en una película de dos horas, descubriremos algún día que Olivia siempre fue una cazafortunas?
Lizzie Bear, lejos de desaparecer de la serie -sabíamos que firmó como regular para toda la temporada-, haría todo lo posible por volver a la Casa Blanca. ¿Significan las novedades que vamos a ver a Susan Ross más a menudo? Son todo buenas noticias esta semana. Serie coral, Ellen Pompeo, serie coral.
¿Lo de Lizzie y David? Asqueroso. Se me han revuelto las tripas.
Huck y Quinn siguen siendo random. Me pregunto cómo funciona la cabeza de un guionista que decide introducir un nuevo miembro en el equipo de gladiadores cuando ya tiene a dos, completamente olvidados, a quienes podría dar un toquecito, o una reforma general. Nada que ver con Abby, que cada día crece más por sí sola y en su relación con Olivia. Cyrus, por su parte, admite estar celoso de Liv porque ahora ella es la POTUS, algo así como la reina regente. Lo es. Cyrus rara vez se equivoca. ¿Creéis que, como si se tratase del giro final en una película de dos horas, descubriremos algún día que Olivia siempre fue una cazafortunas?
Lizzie Bear, lejos de desaparecer de la serie -sabíamos que firmó como regular para toda la temporada-, haría todo lo posible por volver a la Casa Blanca. ¿Significan las novedades que vamos a ver a Susan Ross más a menudo? Son todo buenas noticias esta semana. Serie coral, Ellen Pompeo, serie coral.
¿Lo de Lizzie y David? Asqueroso. Se me han revuelto las tripas.
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