Esta semana American Horror Story aterriza en nuestras pequeñas pantallas con su quinto episodio y con él continúa la historia del hotel Cortez. En este capítulo no pasa nada especialmente importante, más allá de las transformaciones que están sufriendo Iris y Alex; aunque para nuestro gusto lo mejor del capítulo es la historia de Liz Taylor, que nos muestra el triunfo de la libertad personal y la superación.
El capítulo comienza con Donovan que acude con su recién transformada madre a la casa de Ramona Royals ofrenciéndole su ayuda para acabar con la condesa. El plan es que Iris mantenga su conversión en secreto e intenté infliltrarse en el hotel a favor de estos, suponemos que con la idea de acabar con los niños vampiros, ya que no han especificado absolutamente nada sobre el plan. Y, hasta aquí la aparición de Donovan y Ramona, a partir de aquí todo el capítulo se va a centrar en la transformación de Iris, que no le está siendo nada fácil y, para colmo, llegan al hotel unos pijos un poco insoportables y con muchas exigencias. Iris se siente incapaz de atender a semejantes huéspedes y tiene que contar con la ayuda de Liz Taylor para darles su merecido. La primera ocurrencia es darles paté de gato, pues estaban siendo demasiado exquisitos con la comida; después Iris ya termina matándolos, cosa que se veía venir desde que pisaron el hotel.
Mientras ocurre todo esto, Iris le pregunta a Liz sobre su vida anterior y esta le cuenta que fue con ayuda de la condesa que consiguió superar esa barrera que le estaba impidiendo ser ella misma y disfrutar de su libertad sin miedos y, ¿qué mejor sitio para ser ella misma que el hotel Cortez? Además de esto resulta que tiene un hijo y que está casado, pero que les sigue mandando dinero. Una historia con poca chicha, pero que aún así ha sido de lo mejor del capítulo.
Otra que está sufriendo el cambio de humano a vampiro es Alex, que comienza el capítulo dándole sangre al niño que tenía enfermo en el hospital y, claro, este acaba matando a sus padres y a algunos profesores y contaminando a todos los niños de su clase, a los que convence para que les cuenten a la policía lo que él quiere. Una trama más que innecesaria, ya que le sobran actores a Ryan Murphy como para preocuparse de un grupo de niños vampiros liándola por la ciudad, podría centrarse en los que ya tiene que muchos de ellos apenas salen. También hemos podido ver como la condesa impone sus condiciones a Alex para que pueda estar junto a su hijo eternamente. Pero ¿y la otra hija de Alex?¿Por qué no la transforman también? si ya que estamos...
Por parte del detective Jhon, esta no ha sido una buena semana, ya que lo han despedido y encima se ha acostado con Sally sin saber prácticamente cómo. Vamos que se va a volver loco en el hotel y encima le va a dar por refugiarse en el alcohol, otra vez. Además, cuando se entere de que su mujer se ha convertido también en vampiro y su hijo está vivo, pues lo mismo le da un infarto.
En general, como ya he dicho, no ha pasado mucho y hay personajes que nos quedamos con ganas de ver más y que tengan más intervenciones en la serie, como por ejemplo Sally, Ramona o March. Suponemos que tiempo al tiempo.
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