Nadie esperaba que Tatiana Maslany acabara siendo nominada a un Emmy. Absolutamente nadie. Después de tres años pidiendo la nominación de la Maslany, parecía imposible que fuera a colarse entre las seis nominadas, especialmente en un año en el que la categoría de Mejor actriz dramática ha estado más ajustada que nunca. Recordemos que Maslany ha dejado fuera a Julianna Margulies, Kerry Washington, Vera Farmiga, Taylor Schilling e incluso Ruth Wilson, todas con a priori más posibilidades que ella.
No obstante, si hay una razón por la que nadie esperaba que Maslany no fuera nominada a los Emmy, es simplemente porque, históricamente, la Academia de televisión estadounidense siempre ha rechazado propuestas fantásticas y de ciencia-ficción. Especialmente, en los últimos años.
No es tan extraño ver a series de ciencia ficción en los Emmy, a pesar de todo. Las categorías condescendientes técnicas están plagadas de estas series, y es más o menos común que algunas de ellas consigan ser nominadas a mejor comedia o mejor drama. Star Trek, Bewitched, Quantum Leap, Star Trek: The Next Generation, Expediente X, e incluso Joan of Arcadia o True Blood optaron al galardón en su día, por ejemplo. Lost ganó el que probablemente sea el único Emmy a mejor drama de la ciencia ficción. Y, sin ir más lejos, Juego de Tronos lleva años compitiendo en la categoría de mejor drama, y los expertos aseguran que 2015 será su año.
En cuanto a los premios interpretativos, más de lo mismo. En su día, Lindsay Wagner ganó un Emmy por The Bionic Woman, y Gillian Anderson por Expediente X . Recientemente, Peter Dinklage se lo llevó por Game of Thrones (aunque como por actor secundario, que es otro cantar). También han estado nominados David Duchovny por Expediente X; Jennifer Garner y Victor Garber por Alias (si es que la consideramos "ciencia-ficción"); Matthew Fox por Lost; o Amber Tamblyn por Joan of Arcadia (la última nominación recibida por una actriz de una serie de este tipo). Este año, tanto Dinklage como Emilia Clarke y Lena Headey han sido nominados por Juego de Tronos, la cual debe ser entendida más como serie de HBO y como fenómeno de masas que como serie fantástica.
Lo que sí es más corriente es que la Academia rechace de pleno la ciencia ficción y las series fantásticas. Son históricos los rechazos a Buffy, Battlestar Galactica o Fringe, por mencionar solo algunas. Por regla general, las series de este tipo suelen obtener nominaciones a premios técnicos, como mucho (hasta Xena, en su día, ganó un Emmy a mejor música).
Entonces, ¿por qué han nominado a Tatiana Maslany?
No basta con pensar que la actriz ha sido nominada simplemente porque es buena o porque es capaz de interpretar a una decena de personajes (y a otra decena que interpreta a la decena anterior) y resultar creíble. Eso es necesario, pero no suficiente. Lo más lógico sería pensar que el fenómeno fan por fin ha demostrado su verdadero potencial, de modo que ha colocado a una actriz hasta ahora prácticamente desconocida, protagonista de una de las primeras series originales de un canal de segunda, en el foco de la industria.
Y no olvidemos, tampoco, que Orphan Black es más que una serie de ciencia ficción; es una serie inclusiva, con un trasfondo social enorme y que ha tenido un impacto brutal en un público que busca algo más que entretenimiento en series como Orange is the New Black o Transparent (ambas nominadas, por cierto): un público que busca una serie con la que poder sentirse identificado o identificada como individuo. Ese matiz se ha dejado ver en toda la campaña previa a los Emmy:
Evidentemente, hay ciertos intereses y motivaciones más corporativos que no podemos demostrar, pero que tambíén hay que tener en cuenta (no seamos tan inocentes de pensar que los académicos deciden tan libremente a quien nominan, o lo que votan), pero debemos quedarnos con la idea de que el talento de la actriz unido al impacto que la serie ha tenido en el público, han sido la clave de esta inesperada nominación.
Los Emmys, a veces, son capaces de ver más allá de sus narices. Como decía ayer en Twitter, esta nominación convalida numerosos años de decepciones de la ciencia ficción y, aunque Maslany no gane (ni lo penséis), esto es un premio en sí mismo.
se lo merece, ojala nominen a vera farmiga el proximo año, seria una historia similar.
ResponderEliminarQué cierto todo y qué interesante. Se merece el galardón aunque no lo ganará y la ciencia ficción históricamente ha merecido mucho más.
ResponderEliminarLos votantes de los Emmy han mostrado muchas veces que votan los que les da la gana, no creo que hay buscar mas alla de eso, pueden llamarme ingenuo, pero yo a vosotros os llamo paranoicos. Quitando eso, me ha gustado mucho el articulo, y creo que el talento de Tatiana ha ganado.
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