Hace tiempo que no hablamos de Jane the Virgin, pero la serie que apuntaba
a ser el estreno mamarracho del año se ha convertido en una de las
nuevas series favoritas de los críticos americanos y también del
público español con apenas 16 episodios emitidos. Una voz en off
que recuerda a Pushing Daisies y un punto autoconsciente y cachondo
convierten a esta historia de una chica virgen que se queda
embarazada tras ser inseminada por error en algo muy disfrutable.
Pero Jane the Virgin trasciende la mera parodia y consigue ser una
serie de calidad en muchos aspectos. Los repasamos:
1) Los personajes
Aunque sobre el papel los personajes de
Jane parecen seguir los arquetipos de un culebrón venezolano (de los que la misma serie se burla), con el
paso de los episodios hemos ido viendo nuevas caras de todos ellos
que nos demuestran que son mucho más. Petra, por ejemplo, no es la
clásica villana plana, manipuladora y sin escrúpulos, sino que todo
lo que hace es comprensible viendo lo que ha sufrido. Y Michael, el
novio inicial de la protagonista, estaría condenado a que Rafael le
hiciese sombra en otra serie, mientras que aquí es alguien con quien
no cuesta nada identificarse, pese a que haya cometido errores.
2) Los juegos narrativos
La voz en off de la serie no solo sirve
para reírse de los protagonistas y la situaciones en las que se ven
envueltos. También se utiliza para mostrarnos el punto de vista de
los personajes (el guiño a The Affair de hace unas semanas fue
impagable), volver a momentos del pasado para revelarnos detalles
nuevos y, en definitiva, enriquecer la historia al mismo tiempo que
recuerdan lo ocurrido sin ser insoportablemente redundantes, a lo How
To Get Away With Murder.
3) El diseño de producción
No es The CW una cadena que pueda
gastar mucho en la producción de sus series, pero la mayoría le
quedan resultonas (las escenas de acción de Arrow están muy
conseguidas). Con Jane the Virgin van un paso más allá: gracias a
la fotografía y el diseño de producción, la serie nos transporta a
un universo lleno de color y casi de ensueño que ayuda a transmitir
que no estamos viendo la vida real, sino más bien un cuento.
4) Gina Rodriguez (y el reparto)
Nadie cuestionó el Globo de Oro a Gina
Rodriguez como mejor actriz de comedia porque ésta sin duda lo
merecía. La protagonista de Jane the Virgin se ha convertido en una
estrella emergente a base de clavar todas sus escenas: Jane
perocupada, Jane emocionada, Jane fangirleando con una de sus
escritoras favoritas, Jane haciendo el ridículo... Y, aunque es ella
quien más brilla, el resto de actores de no palidecen en
comparación. Desde Andrea Navedo, dando vida a su madre (la versión
latina de Lorelai Gilmore), y Jaime Camil, que interpreta a su padre
(el loco y ególatra protagonista de un exitoso culebrón); hasta
Yael Grobglas en su papel de villana mamarracha.
5) El equilibrio dramático y cómico
La carcajada está garantizada con
personajes como Rogelio De La Vega en Jane the Virgin, pero no deja
de ser sorprendente que una serie que quema trama a tal velocidad
logre que los momentos emotivos funcionen tan bien como lo hacen. Los
protagonistas están tan bien definidos que nos importa lo que les
pase (#TeamMichael #SufroComoPetra #RogelioMyBrogelio #VivaDeLaVega),
y con escenas como ese baile a ritmo de David Bisbal del último
episodio queda claro que Jane también puede ser un happy
place.
6) Su compromiso social
La serie de CW no ha tenido miedo a
tocar temas como la inmigración (ni a posicionarse), y lo hace
siempre con destreza. Que la mayoría de sus protagonistas sean
latinos le permite reflejar un sector de la población americana que
rara vez lleva la voz cantante en una serie, y que además sean
mujeres y de educación cristiana, sin que esto signifique que sean
puritanas o estúpidas, le da una dimensión aún más interesante.
Pocas series aguantan una temporada de 22 episodios al nivel que lo hace esta. Y a vosotros, ¿os convence la serie u os habéis hartado ya de ella?
Completamente de acuerdo con todo lo que dices, Diego. Esta
ResponderEliminarserie sin duda ha sido lo mejor que nos ha traído The CW, un canal que este año está haciendo historia con fantásticas series como The Flash y Arrow. No incluyo The 100 porque me sigue pareciendo una soberana tontería. Creo que el éxito de Jane the virgin se sustenta particularmente en una cosa que mencionas: Su capacidad de burlarse de si misma sin miedo al ridículo. Aunque los personajes están muy bien construidos, a veces se comportan de manera exagerada para arrancarnos una sonrisa. La voz en off de ese narrador, que en otras circunstancias sería un lastre, aquí es un elemento que tiene vida propia, pues alimenta el humor de muchas situaciones y nos dice en el fondo que esto es ciertamente un cuento de
hadas.
Me gusta mucho Luisa, me hace reír mucho y ya quiero que vuelva a aparecer que quiero saber como sigue su historia con Rose.También coincido con el comentario de Federico, The CW esta cada vez mejor con su series, quiero defender a The 100 que a pesar de algunas actuaciones, la historia esta muy bien lograda y con bueno efectos. En fin, muy buen post de la serie
ResponderEliminarEs una serie muy currada, tiene un guión mucho más inteligente de lo que podría parecer, y combina bastante bien el drama y el humor inclinando la balanza hacía este, los personajes dan bastante juego y estan muy bien definidos y la voz en off y sobretodo el grafismo con el que juegan son realmente un acierto!!
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