Esta semana la cosa ha ido de juicios. Una ya no sabía si estaba viendo la espléndida How To Get Away With Murder y su mismísima Annalise Keating reencarnada en el abogado de la defensa de Mona, o de verdad estaba haciendo frente a la soporífera Pretty Little Liars.
El misterioso Varjack vuelve a ser el protagonista del capítulo. Caleb rastrea el número de teléfono que hay en el ticket que Emily robó, pero no obtiene ninguna localización. Optan por enviar un sms a ese mismo número con un teléfono desechable, pero no obtienen ninguna llamada de vuelta a ese teléfono. Y digo a ese teléfono porque Aria sí que recibió una llamada desde el supuesto número de Varjack, pero al descolgar solo se oía una canción.
Hanna reconoce la canción, era la que Mona tocaba cuando iba a su casa. Deciden ir a rastrear la casa de Mona porque podría haber más pistas como las que encontró Hanna guardadas en uno de los libros. Cuando las chicas habían desistido de llamar a la puerta, oyen la misma música que a través del móvil y deciden entrar. Así, sin más, la puerta por lo que se puede deducir estaba abierta como suele ser normal en cualquier hogar que se precie. Cuando suben, encuentran la habitación revuelta y un mensaje de "A": "El que lo encuentra se lo queda". Pero las chicas piensan que puede ser una trampa de "A" y, quizás, este no ha encontrado nada. Spencer busca y encuentra detrás del cristal del espejo la siguiente nota que Mona habría guardado.
Mientras las chicas están en la habitación de Mona, se ve a Andrew en el jardín observándolas. Sabíamos que Aria tenía poco ojo para la ropa y ahora sabemos que también para los novios. Quizás nos acaba saliendo también escritor como Ezra y monta un sótano desde donde vigila a las chicas, pero después nos cuenta que todo es por motivos literarios, y aquí nadie ha visto nada.
Comienza el juicio de Ali y el abogado de la defensa relata al jurado el falso secuestro de la joven. ¿Cómo lo saben? El abogado dice tener dos testigos y uno de ellos podría ser Cyrus. Jason, al testificar, cambia su versión y defiende que no cree que sea su hermana la que mató a Mona. El abogado saca a relucir el affaire entre Jason y la madre de Hanna como prueba de que esto podría haber provocado el cambio de versión del hermano de la acusada. Se armó la gorda.
Todo está aún por determinar en los juicios de Alison y Hanna y poco movimiento se ha producido en las vidas privadas de las mentirosas más grandes de la televisión. Spencer sigue sin verse con Toby y besándose con todo aquel que le cae bien, Caleb tiene a su novia prisionera, la novia-casada-con-un-hetero de Emily está en búsqueda y captura, y Aria eligiendo a novios sospechosos.
¿Qué os ha parecido a vosotros el capítulo? Yo aquí estoy esperando a que acabe la temporada.
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