Togetherness, juntos y revueltos

Algo le pasa a HBO con sus comedias, o al menos soy yo el que tiene un problema con ellas. Sea cual sea su propuesta, su temática o su ejecución, siempre me da la sensación de que la mayor parte de estas series (salvo Girls y Veep, en los últimos años) están a medio hacer. ¿Puede que sea por esa declarada sensación de dejadez, de improvisación? ¿puede ser que una comedia de “autor” no proporcione los mismos resultados, sino peores, que una sitcom con treinta guionistas escribiendo chistes de pedos?

Evidentemente, el público no es el mismo, pero estas propuestas dirigidas a nichos cada vez más específicos cuentan, además, con el problema de que no siempre coinciden con el público que ve la HBO (algo que, aunque sea por la amplitud de la audiencia, no pasa en las networks). Todavía no tenemos los datos de audiencia de su nueva propuesta, Togetherness, pero algo me dice que no nos sorprenderán los números.

Al fin y al cabo, Togetherness es una serie demasiado concreta: mitad comedia familiar, mitad comedia romántica, con un toque decadente propio de la dramedia indie que parece triunfar en la taquilla USA pero que en realidad no lo hace. Los hermanos Duplass son autores, productores y/o directores de algunas de esas propuestas (Safety Not Guaranteed, Cyrus, Jeff Who Lives at Home) y son los que firman esta nueva serie de la HBO. Al menor, Mark, quizás no le pongamos cara pero protagoniza la serie. Al mayor, Jay, le hemos redescubierto recientemente gracias a Transparent, donde interpreta al hijo varón de Maura Pferfferman.

Togetherness cuenta la historia del matrimonio Pierson, Brett (Mark Duplass) y Michelle (Melanie Lynskey, que se hizo famosa gracias a Two and A Half Men. Su vida sexual se resiente con la paternidad, y ambos satisfacen sus deseos masturbándose por separado, ya sea por obligación o por necesidad. En medio de esta bomba de relojería (que por cierto, ambos se toman con una inverosímil naturalidad), aparecen en escena dos “okupas” que imagino pondrán sus vidas patas arriba en los próximos episodios: Alex (Steve Zissis), un actor que no encuentra ni encontrará hueco en su profesión, cada día más gordo y más calvo; y Tina (Amanda Peet), la hermana mayor de Michelle, desesperada por encontrar un hombre y no morir sola.

A Togetherness no es que le falte humor (no es que le sobre tampoco, precisamente), ni química en su reparto (aunque un poco de “sangre” también se agradecería), pero es evidente que a su propuesta le falta garra. Y le falta, sobre todo, atractivo. Su evidente intención por forzarse a sí misma a retratar de la manera más natural diferentes perspectivas acerca de la crisis de mediana edad, tiene como resultado un producto que en ocasiones parezca forzado y, prácticamente en su totalidad, inverosímil. Togetherness es natural, es dinámica y es interesante, pero le falta esa chispa de artificio, de ilusión y de televisión que marca la diferencia entre una buena historia y una historia que pretende serlo. Como masturbarse.