Los hermanos Winchester han vuelto de las semanitas de descanso que las Olimpiadas le han proporcionado, y lo ha hecho en un episodio bastante interesante. Todos sabemos que mi interés por la trama central de la temporada es casi nulo, pero hay que reconocer que están haciendo bien su trabajo. Lo mejor del episodio, sin duda es volver a ver a Kevin y a su madre, y han sido ellos los que han traído la mejor trama del episodio. ¿Preparados para esta nueva tanda de episodios?
Rescate
El búnker de los hombres de letras está encantado; un espíritu está haciendo estragos en su interior. Lo raro es que el búnker está protegido de todo espíritu o demonio, por lo que sea quien sea, ha tenido que morir dentro del búnker. La primera opción es que el espíritu sea Kevin, pero Dean quemó su cuerpo, por lo que no es una opción viable. Aun así, pronto verán que en realidad, sí es Kevin y que intenta ponerse en contactos con ellos. Cuando consigue hacerse visible ante ellos, Kevin cuenta lo que sucede: desde que los ángeles cayeron, el otro lado está abarrotado y no pueden seguir adelante. Pero Kevin se les presenta por una razón: les quiere pedir un favor. Parece ser que Crowley tenía razón; su madre no está muerta, y lo sabe porque un espíritu recién muerto, asegura haberla visto justo antes de morir. Al estar atrapados en el otro lado, los espíritus se quedan en el lugar donde fallecieron, por eso Dean y Sam tendrán que ir en busca de dicho espíritu para sacarle información sobre la madre de Kevin.
Dicho espíritu les cuenta lo que sabe: 2 hombres tienen a varias personas encerradas en unos trasteros comunicados los unos con los otros. Ella escapó y por eso la mataron, pero la madre de Kevin seguía presa cuando ella murió. Rápidamente reconocen la descripción de uno de los captores: Crowley, por lo que se ponen a investigar los almacenes más cercanos hasta que dan con el correcto. Efectivamente, la señora Tran sigue viva y consiguen acabar con el siervo de Crowley. De vuelta en el búnker, la señora Tran se reúne con el espíritu de su hijo, y descubren qué es lo que tiene anclado a Kevin en el búnker: un anillo de su padre que estaba entre sus pertenencias. La señora Tran decide llevarse a su hijo consigo, aunque este no se irá sin hacerles prometer a los hermanos Winchester que arreglarán sus problemas. Promesa que Sam se negará a cumplir.
Nuevo Líder

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