Con el nombre del episodio ya nos lo dice todo sobre el tema del episodio: los ángeles. Se acabó lo bueno, ha vuelto la trama central de la temporada, y sí, da mucha pereza. Era de esperar que tras varios episodios con tramas diferentes, en algún momento, la atención recayera en los ángeles. No lo voy a negar, no me apetecía nada ver el episodio, y la primera mitad ha sido soporífera provocando varias pausas. El resto del episodio, dentro de lo que cabe, ha sido medio aceptable.
Rit Zien

Un hombre que está al borde del suicidio se evita las molestias cuando aparece alguien dispuesto a mitigar su dolor. La forma de hacerlo es
proyectando una luz sobre él haciendo que explote bañando todo su alrededor de polvo rosa. Es la 4ª víctima de dicho desconocido y cuando Castiel se entera no duda en hacérselo saber a Dean. Por supuesto, el mayor de los Winchester se ocupará del caso, aunque será Castiel quien descubra de qué se trata.
El desconocido es un Rit Zien, una clase ángel que durante las batallas celestiales tenía la función de curar a los heridos, a no ser que el daño fuera irreparable, lo que le llevaba a su liquidación sin dolor.
Con su caída, el Rit Zien se ha dispuesto a seguir con su función en la Tierra; cuando nota el dolor de alguien, acaba con su vida. Como veremos en el siguiente apartado veremos que el Rit Zien
irá tras Castiel, y con la ayuda de Dean acabará con su vida.
La Vida de Steve

Esta semana
vuelve a aparecer Castiel, aunque con una nueva identidad: Steve. Ahora, “Steve”
trabaja en una tienda mientras aprende a ser humano, y la verdad es que cada vez lo sabe hacer mejor. Castiel se ocupa de todo, y
se queda a dormir en la tienda con la excusa de que se queda a trabajar hasta tarde –aunque sabemos que es porque no tiene a dónde ir–, y eso le hace conseguir una cita con una compañera. En realidad,
él piensa que es una cita, y se lleva la sorpresa más adelante cuando descubre que quien tiene la cita es ella, pero no con él. Lo que ella quería era un niñero de confianza,
lo que pone triste a Castiel facilitando un poco más que el Rit Zien le encuentre. Tras las palabras del Rit Zien diciendo que
le entristece más ser humano porque siente que se ha dado por vencido siendo ángel, Castiel decide seguir viviendo la vida de Steve y no irse con Dean.
Traducir

Kevin sigue con la traducción de la tabla de los ángeles, que la verdad es un poco lento. Hasta ahora,
lo único que ha conseguido es transcribir la tabla en unos símbolos de una lengua que desconoce, por lo que el objetivo de Kevin y de Sam será traducirlos. La tarea
no será fácil y llegan a un camino sin salida, por lo que probarán preguntándoselo a Crowley. Como era de esperar, Crowley sí que sabrá traducirlo pero a cambio
quiere poder hacer una llamada. Tras pensarlo, Sam accede y Kevin proporciona su sangre para poder hacer la llamada.
Crowley contactará con Abaddon para reclamar su reino, pero Abaddon sigue en sus trece, creando un imperio lleno de caos. Por supuesto,
Crowley le advierte que así sólo llevará al Infierno a la destrucción, pero Abaddon pasa de su consejo. Una vez finalizada la llamada, Crowley se dispone a traducir los símbolos dando una noticia que Sam y Kevin no quieren oír:
el hechizo de la caída de los ángeles es irreversible. Además,
Crowley se quedará con la jeringuilla que Kevin utilizó para inyectarse el resto de sangre.
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