Si el capítulo anterior nos puso en situación a todos los personajes, este In Absentia nos muestra con más detalle esa guerra civil entre la Resistencia y los Observadores, ese futuro apocalíptico en el que se encuentran los personajes y que con tanto esfuerzo lucharán por cambiar.
El frágil cerebro de Walter sigue sin recordar el plan trazado por él y Septiembre para derrocar la dictadura impuesta por los Observadores, lo que parece que va a llevar a la serie por el camino más procedimental, como antaño, ya que la misión de Olivia, Peter y Etta va a ser encontrar los vídeos que Walter grabó explicando las partes del plan definitivo para el fin de los hombres de traje. Sin embargo, aunque nunca me ha disgustado el Fringe más procedimental, esta explicación para restaurar los planes de Walter me ha parecido un poco cutre. ¿No hubiera sido más interesante no matar a Septiembre y ver cómo Walter y él planeaban todo en vez de que ahora tengamos que seguir la búsqueda de las cintas de vídeo perdidas? Reconozco que es hablar por hablar, ya que aún no sabemos como se van a desarrollar el resto de episodios pero espero que esta búsqueda no llegue mucho más allá de dos o tres capítulos y que los guionistas nos guarden una trama mucho más épica para la temporada final.
Por supuesto, no todo es malo. Como nos recuerda Olivia, ella y Peter hace poco más de dos meses que perdieron a su hija Etta con tan solo 5 años y, de repente, lo único que conocen es una versión futura 20 años más mayor de ella. A Peter y a su simpleza no parece que le importe mucho el tema, Olivia, sin embargo, sufre al conocer a una hija que en realidad nunca tuvo, una hija que ha crecido sin sus padres y que, además, se ha convertido en un soldado que solo vive para ganar la guerra contra los Observadores y que ha olvidado (o que nunca aprendió) la compasión. La nueva dinámica familiar que nos plantea esta temporada aún no está muy desarrollada, al igual que el vínculo entre madre e hija, así que espero que estos momentos den pie a una relación que tengo interés por conocer.
La falta de escrúpulos de Etta ha sido, sin duda, lo más interesante del episodio (ese método de tortura acelerando el envejecimiento del hombre capturado da realmente miedo), junto con Olivia, que se vuelve a confirmar como el centro y corazón de la serie y parece que la implicación emocional que despierta en las personas que le rodean le llevarán a ser una pieza clave en la guerra contra los Observadores.
Un episodio consistente y entretenido, aunque no especialmente destacable, pero no puedo olvidarme de uno de los momentos más escalofriantes que he visto en la serie: la cabeza de Simon Foster, antiguo compañero de Etta interpreado por Henry Ian Cusick y que, sinceramente, tenía la esperanza de volver a ver aunque no en esas circunstancias. ¿Qué opináis vosotros?
Me ha gustado que hayan sacado la faceta oscura de Etta porque explica mucho el contexto de la nueva temporada. El episodio no ha estado mal pero me pregunto a dónde irán con todo esto... ¿y cuándo crearán un nexo con las temporadas anteriores?
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