Tras una guerra insaciable entre Percy y Amanda, y la inminente muerte de un personaje nada interesante, nos estancamos en un episodio medianamente aprovechado y carente de emotividad. Esta semana, Cassandra fue la que dijo adiós, junto al pequeño Max. Ya podemos suspirar aliviados porque Cassandra y Max, además de ser insufribles, eran un gran obstaculo en la vida de Michael y Nikita. Por otro lado, la intrincada red de alianzas dio como resultado el final de Semak, la victoria del astuto Ari y la derrota de Amanda. Es difícil saber con claridad en que bando estamos. Arising nos trajo mucho drama familiar, con Alex y su inocente madre, y el rol de Cassandra como topo de Gogol.
Inicialmente como la esposa de un presidente Bielorruso, después como un agente encubierto de MI6 y más tarde, como un doble agente de Gogol, Cassandra ha probado tener más de una faceta por lo cual es muy racional que la señora decidiera marcharse sin dejar rastro. Con la ayuda de Michael y Nikita, Cassandra escapó intacta al desvelarse su tapadera. Talvez la despedida fuese necesaria para encerrar éste ciclo peligroso para todos los participantes. El plan funcionó y Cassandra ya no está en nuestro mapa... Por ahora.
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Cabe recalcar que el presupuesto de la serie ha disminuido considerablemente. Sus audiencias son bajas, pero si queremos compararlas con otras series de la cadena, es muy posible que haya un debate, sin contar con el factor de los días Viernes. Ya no tenemos tantas explosiones, escenas de acción intensas ni tiroteos como antes. Carla está muerta, Semak también, Katya vive en Grecia y Michael ya no tiene familia además de Nikita. ¿Que nos queda ahora? ¿Están los escritores cerrando las historias con delicadeza? ¿Sobrevivirán Nikita, Michael, Alex y hasta División, a una cancelación real?
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