Lo malo es que cuanto más tiempo pasa, la bala que está alojada en la cabeza de Bobby daña más sus recuerdos y hay detalles que empiezan a desaparecer. Así que tiene una carrera contra reloj para salir del coma, aunque sólo sea para decirles a los chicos los planes que los leviatanes tienen, ya que no pudo decírselo antes de recibir el disparo. Al principio, Bobby tiene la ayuda del recuerdo de su amigo Rufus (muerto en la temporada pasada), pero él, como la mayoría de las cosas, termina desapareciendo de su recuerdo. Finalmente consigue salir del coma, luchando contra el recuerdo de su padre maltratador. Lo malo es que tras decirles a los chicos un número, vuelve a caer en coma. Y allí está esperándole la parca, en el único recuerdo que le queda a Bobby, para saber la decisión de Bobby de ir al más allá o quedarse como un fantasma sin recuerdos.
Por otro lado, Dean y Sam se enfrentan a un Bobby hospitalizado, en el que cada minuto que pasa es más difícil que Bobby salga del coma. Los hermanos tienen que lidiar tanto con el dolor, como con abogados del hospital para que Bobby done los órganos, como con el jefe de los leviatanes que se pasa para regodearse en su victoria. Los doctores no pueden hacer nada hasta que no presente alguna mejora, ya que cualquier paso en falso puede causar su muerte. Por fin Bobby despierta del coma justo antes de entrar en quirófano y les escribe a los chicos un número ya que no puede hablar. Lo malo es, que acto seguido pierde la consciencia y entra en encefalograma plano.
Nos despedimos éste año de Supernatural, el 6 de Enero los hermanos Winchester seguirán su aventura contra los leviatanes, la pregunta es: ¿Bobby les acompañará?. No ha estado nada mal el episodio, aunque se han centrado más en el drama que en la acción. Esperemos que el personaje de Bobby siga dando guerra ya que es un personaje bastante querido por todos. ¿Qué nos deparará el resto de temporada?¿cómo conseguirán ganar la batalla contra los leviatanes? Sólo nos queda esperar.
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