El tercer capítulo de esta nueva temporada de Gossip Girl nos ha devuelto a esa serie agonizante y aburrida a la que nos habíamos acostumbrado la temporada pasada.Viendo la promo de la semana que viene, la esperanza de que haya sido un nexo a algo mejor aumenta, pero tampoco quiero hacerme ilusiones.
Las líneas argumentales de esta semana se han centrado, por un lado, en Dan y Blair. Ella, que ha recibido los test de paternidad de su bebé y se niega a abrirlos, y él, que la intenta ayudar y apoyar a toda costa mientras trata de que su libro no salga a la luz. Finalmente, ella va a ver a Chuck para decirle de primera mano que su hijo es de Louis (pero en el fondo le hubiera gustado que fuera un mini Bass), y al darle la noticia al padre, vemos que esconde el sobre, cerrado, no sabemos si porque no lo ha llegado a abrir y ha dicho lo que ha querido, o porque simplemente no lo ha tirado. Y nuestro escritor, el chico solitario, tras sufrir un engaño por parte de su mentor y amigo, Noah Shapiro (David Patrick Kelly, Twin Peaks), quien finge atribuirse el mérito de haberlo escrito, sólo para que Dan salga a luz como escritor y decida publicarlo.
Por otra parte tenemos a Serena de vuelta en Nueva York en compañía de su falsa prima Charlie/Ivy, quien, tras un pequeño momento de debilidad y arrepentimiento, decide volver con su novio y olvidarse de toda la farsa, pero ante los lujos gratuitos y unas palabras reconfortantes de Blair, decide quedarse con los Rhodes/Van der Woodsen/Humphrey/lo que sean ahora y chantajear a Carol, su falsa madre, para que no la descubra.
A su vez, Nate empieza su nuevo trabajo con Diana, en el que se siente utilizado, primero como juguete sexual, y después como cebo para provocar un escándalo. Las intenciones de la recién llegada mujer fatal (porque es lo que parece, para qué engañarnos) son crear polémica, convertirse en una nueva Gossip Girl, y para ello, con la ayuda de un Nate que no quiere seguir en el negocio familiar bajo ningún concepto, roba todos los móviles de los invitados de una fiesta (menos los de Blair y Dan, que Nate se encarga de esconder) y los chequea en busca de contenidos privados que poder utilizar. Con esto, una tal Ivy sale a la luz, ¿descubriran quién es?
Pese a lo aburrido y monótono que me ha resultado este capítulo, no puedo dejar pasar la ocasión de nombrar la gran interpretación de Ed Westwick haciendo de un Chuck Bass destrozado ante la noticia de Blair, con su recién adquirido amigo canino. Es un giro radical a lo que nos tiene acostumbrados, y lo ha clavado. Bravo.
Promo
No ha sido para nada aburrido y monótono, definitivamente el mejor capítulo de la temporada y uno de los mejores de la serie. Blair y Dan como amigos resultan inevitablemente adorables. La actuación de Ed, es de lo mejor e incluso se le empieza a aceptar a Charlie/Ivy en la historia, lo cual creía que sería algo imposible (al menos para mí). Además el hecho que Louis aceptara el embarazo de Blair, te hace odiarlo y quererlo al mismo tiempo (Digo, paro los que son Chair, andamos buscando la menor excusa para alejarlo de Blair). Aunque sigo insistiendo que deben de buscarle una mejor pareja a Nate que se merece algo mucho mejor.
ResponderEliminarCHAIR CHAIR CHAIR!
ResponderEliminarBueno, me alegro de que te haya gustado IsraelRuiz, gracias a gente con tus gustos sigue en antena, pero para mí nada podrá compararse con la 1ª temporada...
ResponderEliminarAl pobre Nate hace tiempo que no le dan nada interesante, la verdad... como le han quitado a Jenny y a Vanessa, no saben qué hacerle, que el rollo con Serena ya cantaba mucho...
Anónimo... totalmente de acuerdo xD
Gracias por pasaros!
Parece que va tomando fuerza. A mi me encantan Blair y Chuck. Serena... ñah. Asi que hay que ver que tal la llevan, porque se pone interesante (:
ResponderEliminarAun me queda la duda si el bebé de Blair si es del principe o de Bass! DX