Hay algo que me llama la atención de The Walking Dead, y es que en el fondo es una serie más. Tiene sus particulares diferencias, obviamente, pero es más de lo mismo. No lo digo en absoluto como una crítica: hay series que han intentado mostrar algo diferente y literalmente se han hundido en la mierda. A lo que me refiero es al concepto de líder y de cómo aparecen las figuras de héroes. Porque sin duda es "liderazgo" la palabra clave de este capítulo, y los "héroes" son los protagonistas de un mundo desmembrado. Y es que no puedo evitar rememorar, como ya dije hace unas semanas, a Lost y a los primeros capítulos de toma de contacto de los losties con su isla, y de cómo se erigen héroes y caen los vencidos.
En The Walking Dead hay dos líderes indiscutibles: Rick y Shane. Y estoy seguro de que algún día se van a enfrentar a muerte (tengo los comic en mis manos, ya os contaré), pero de momento están muy ocupados con la carnicería zombi. Rick en la ciudad, Shane en el campamento. Quién da más.
Shane me cae mal, es como el Jack que intentaba solucionarlo todo en su campamento losteño y que a veces la cagaba mucho. Le pega una paliza (merecida) a Ed, dirige el cotarro como un dictador y ahora la toma con Jim (Andrew Rothenberg), porque ha empezado a cavar hoyos sin ninguna razón aparente. Es un poco extremista, en el fondo: si no entiendes algo, elimínalo. El pobre Jim, que es un bicho raro, acaba encadenado porque quería seguir cavando. Sabe que cavaba porque tuvo un sueño extraño, pero no recuerda cuál.
En la ciudad, está Rick. Sin Merle, se tendrán que marchar, pero antes deben coger la bolsa de armas. Cuando la consiguen, unos hispanos, los vatos, secuestran a Glenn, no sin que antes Daryl coja a uno de los suyos. Cuando van a por su amigo, descubren un verdadero refugio lleno de furiosos hombres armados hasta los dientes. El jefe, Guillermo, quiere las armas a cambio de Glenn, pero los cuatro del campamento no piensan negociar. De repente aparece una abuelilla para mediar en el conflicto: están en un geriátrico donde los ancianos fueron abandonados a su suerte tras el apocalipsis. ¿Los pandilleros? Sus enfermeros y cuidadores. Las apariencias engañan, y Rick, el jefe, les da varias armas como premio.
Cuando los cuatro marchan hacia la furgoneta, descubren que alguien se la ha llevado. ¿Quién? ¿Merle? Si es así, quiere venganza, y volverá al campamento a por ella. Salen corriendo (literalmente), y deberán darse mucha prisa porque allí pasará algo que lo cambiará todo.
Zombis. Sí, decenas de zombis. Con los cuatro hombres todavía lejos y con la escasez de armas, los supervivientes van menguando poco a poco. Primero Ed, después Amy. La hermana de Andrea cumpliría años al día siguiente, pero en cambio resucitará como monstruo. Finalmente, los héroes llegan y acaban con los no muertos.
Jim recuerda por qué cavó los hoyos... eran tumbas.
Puntos a favor:
- Los contrastes entre la calma y la tempestad. En ciertos momentos acabas con los nervios a flor de piel.
- La historia del geriátrico o "cómo las apariencias engañan".
- Jim, ¿es adivino?
- La escena final, para enmarcarla.
- La "muerte" de Amy. Pero lo mejor es que aún no hemos visto su transformación.
En contra:
- Al principio nos engañan con una escena de paisaje turístico por excelencia.
- Shane.
- Lo forzado que es T-Dog en la trama.
- Dale da mal rollo, creo que ya lo dije.
- Que solo queden dos capítulos para acabar la temporada.
Inside "Vatos"
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