House presenta el caso de la chica de 16 años, la niña tiene viruela (enfermedad que se erradicó por completo hace 30 años). Tienen que aislarla y crear la vacuna que hace décadas que no se hace y vacunar a toda la familia. Aparte tienen que hacerle las pruebas de la varicela y sarampión (que son las enfermedades actuales). House sospecha que Cuddy sabe que falsificó las pruebas del caso anterior. Tras hacer las pruebas descubren que la viruela da negativo, pero también la varicela y el sarampión, pero al haber estado buceando, puede ser que no encuentren el problema, y les hace buscar en las articulaciones.
House habla con Cuddy y le dice que no hizo nada malo porque estaba seguro de todo y salvó al paciente, pero Cuddy le pide que se vaya. Taub le está sacando muestras de la parte posterior de las rodillas y descubre en una de ellas los bultos procedentes de la viruela. Pero House empieza a ver el cuerpo de la jóven y descubre unas manchas que desechan la idea de viruela. El hospital está en cuarentena. House se mete en una página erótica para que una holandesa le traduzca el diario del capitán del barco, y descubren que no era viruela porque sólo afectaba a los esclavos y al resto no. El equipo de control de infecciones descubre que el padre de la familia empieza a sangrar y necesita estar en otra habitación aparte (toda la familia está aislada).
Martha descubre que la paciente no tiene el sarpullido ni en las palmas de las manos ni en las plantas de los pies, ella no tiene viruela pero el padre sí que la tiene. El padre en realidad vuelve a tener cáncer de riñón (ya la tuvo hace unos años) y al inyectarle la vacuna de la viruela, le puso tan mal. House le da una medicina, si se mejora él tiene razón, si no...tiene la viruela, pero al darle la medicina, no pueden dejarle salir del aislamiento por si se ha contagiado de viruela.
El padre empeora, tiene viruela y House ha estado en contacto con la enfermedad sin protección. House le comenta al paciente que tiene que despedirse de su familia porque no va a salir de la enfermedad. Mientras se está despidiendo de su hijo, el paciente muere. House está en peligro, todavía no tiene síntomas pero no puede abandonar la sala de aislamiento. Martha no está convencida sobre la viruela y ahora es ella quien se mete en la página erótica para pedir ayuda a la holandesa, sigue leyendo y descubren que el gato que iba a bordo murió (la viruela no mata a animales) y resulta que tienen Rickettsiosis Pustulosa, que sí es tratable y se contagia por ratones.
House demuestra que el cadáver tiene cicatrices negras, por lo que Martha tenía razón y empiezan a darle el medicamento correspondiente a la chica y va mejorando.
OPINIÓN: El capítulo ha sido muy pero que muy bueno, ya era hora que hiciesen algo distinto. Cuarentena, aunque hace unas temporadas hicieron algo parecido, es genial que hagan algo así cada cierto tiempo, y que alguien muera. No siempre tienen que salvarse todos en el último momento. De los mejores capítulos de la temporada.
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