El jueves se estrenó la nueva serie de Kate Walsh, Bad Judge, con una audiencia que dejó mucho que desear. No le auguramos un futuro muy prometedor.
La serie, muy parecida a la premsia de Bad Teacher, trata de una juez de California, Rebecca Wright, que a pesar de ser muy buena en su trabajo, es una juerguista de noche, totalmente irresponsable y, en definitiva, terriblemente inmadura.
La premisa de la serie me interesó (no solo por Kate Walsh), sino porque me pareció muy interesante crear una comedia ambientada en el mundo legal; los juicios pueden ser muy divertidos si se sabe sacar el máximo partido (ya lo hace a veces The Good Wife). Sin embargo, tras el piloto, me sentí muy decepcionada.
Bad Judge tiene potencial, pero por ahora es un caos. La historia de Rebecca con el niño de diez años, por el que siente cariño ya que metió a sus padres en prisión, no funciona, probablemente debido a que el actor que han escogido no tiene mucha gracia y resulta un poco cargante.
De los secundarios todavía no sabemos mucho, aunque siempre es un acierto tener a Ryan Hansen en tu serie. El otro abogado, interpretado por John Ducey, puede dar bastante juego, aunque de momento, nada nos ha convencido realmente.
Es cierto que el episodio tenía algunos puntazos, como condenar al bígamo a un curso de feminismo llevando esta camiseta, pero no ha sido suficiente.
Y a vosotros, ¿os ha gustado? ¿Vais a darle una segunda oportunidad? Yo, por ahora, me bajo de este tren.
El piloto no es muy interesante, estoy de acuerdo con que la trama suponia generar algo gracioso pero de las nuevas comedias es la menos afortunada hasta ahora, en relacion a (a to z, selfie, )
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