Modern Family regresa esta noche
a la parrilla de ABC con su sexta temporada y, por quinto año
consecutivo, lo hace con la seguridad que supone ser la ganadora
del Emmy a la mejor comedia (por encima de, entre otras, Veep
y Orange is the New Black).
Ni los académicos ni el público (sigue siendo la comedia más vista
de su cadena) parecen cansarse de los Dunphy, los Pritchett y los
Tucker, que tienen este año el reto de superarse a sí
mismos en vistas a ganar un sexto Emmy con el que harían historia
superando a Frasier.
Mientras
que en años anteriores la temporada arrancó con un gran evento,
como el compromiso de Cam y Mitchell o el embarazo de Gloria, la
promo de este año no anticipa turbulencias. De momento, sabemos que
el primer episodio se
centrará en la luna de miel de los recién casados,
algo que ojalá dé lugar a situaciones tan disparatadas como las que
vimos en “Las Vegas”, el mejor episodio de la pasada temporada.
Los niños crecen
En
esta nueva temporada, Alex
comienza su último año de instituto,
por lo que puede que la hija mediana de los Dunphy cobre algo más de
protagonismo del que suele tener. Esperemos que esto no signifique
menos foco de atención para Luke y Haley. El primero no para de
crecer, y no estaría mal ver cómo Phil afronta el paso a la
adolescencia de su hijo. La segunda continuó siendo uno de los
puntos fuertes de la serie en la quinta temporada, gracias sobre todo
al talento de Sarah Hyland. Su personaje ha estado algo perdido desde
que dejó la universidad, pero esa
subtrama de comedia romántica con el niñero de Jay y Gloria dio
buenos momentos y parece que va a continuar este año, porque Adam DeVine ha firmado para aparecer en seis episodios más.
Lily,
dueña de los grandes one
liners
de la comedia, puede confirmarse como personaje revelación si le
empiezan a dar historias propias. Tyne Daly (La juez
Amy) aparecerá
en la serie dando vida a su profesora de preescolar.
En cuanto a Mitchell y Cameron, es posible que pasar por el altar
suponga un soplo de aire fresco para su relación. La pareja homosexual
de la serie lleva demasiado tiempo recibiendo tramas flojas, y los
preparativos de la boda no les hicieron dejar de lado su absurda
competitividad y sus anecdóticos enfrentamientos.
En el
hogar de los Pritchett no parece que vayan a cambiar demasiado las
cosas, al menos hasta que crezca el último hijo de Jay y Gloria.
Pero ya sabemos que la razón por la que Modern Family funciona tan
bien no es tanto la evolución de los personajes como por lo
efectivos que son los gags, y para Sofía Vergara y Ed O’Neill
siempre se reservan algunos de los mejores. Eso sí, por lo que
parece, la vida amorosa de
Manny va a ser un poco menos triste este año.
Nuevos vecinos
También
sabemos que en esta sexta temporada volveremos
a tener episodio de Halloween,
algo que siempre saca lo mejor de Phil y Claire. En ese episodio,
llegarán al barrio unos nuevos
vecinos interpretados por Steve Zahn (al
que hemos visto en Treme
y en la fallida Mind
Games) y
Andrea Anders (Better
Off Ted, Mr. Sunshine)
con los que los Dunphy chocarán inevitablemente. Otra
estrella invitada será Kristen Johnston (Cosas de marcianos), una
compañera de trabajo de Mitchell
que se quedará a dormir en casa de éste y Cam.
¿Seguirá
Modern Family siendo la reina de las audiencias del miércoles? ¿Os
empieza a agotar ya o vuestro amor es tan incondicional como el de
los académicos? ¿Ganará un sexto Emmy en 2015? ¿Qué queréis ver
en la próxima temporada?
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