Tal día como hoy, Nochebuena, día en que la gente se reúne con sus familias para pasar una agradable (se supone) velada, en Burbank la familia Bartowski al completo vivirá un día que jamás olvidará. Pero pongámonos en situación que hace mucho que no os contamos nada de Carmichael Industries.
Como bien diría Chuck, "Here are a few things that you might need to now":
- Jeff ahora es listo. Se merece estar en primera posición simplemente por el cambio respecto al Jeff de toda la vida. Devon descubre cuál es el motivo de su comportamiento y consigue revocar los daños cerebrales que hacían a Jeff ser tan "especial".
- Tras descubrir que el Intersect estaba friéndole el cerebro a Morgan, la CIA pone precio a su cabeza, pero quien realmente está detrás de todo no es otro que Decker. El equipo Bartowski (con la ayuda de Beckman, que cada vez participa más con ellos) consigue resolver la situación sin daños, pero Casey es víctima de una trampa y acaba en la cárcel acusado de asesinato.
- Engañados por Decker con el pretexto de que retiraría los cargos contra Casey, Chuck y Sarah, con la ayuda de Verbanski obtienen un virus informático capaz de cualquier cosa en cuestión de segundos, El Omen, pero al entregárselo a Decker, éste, como buen malvado, revela su plan de inculpar a Carmichael Industries de las consecuencias de su liberación. Verbanski, con gran maestría logra arrebatarle el dispositivo y en su lugar pone un detonador. Tras esto, Decker, quien parecía el gran malvado de esta temporada, muere, y Gertrude, tras despedirse de Casey, a quien admite que quiere, huye.
- En la búsqueda del malo malísimo nos encontramos con Robin Cunnings (Rebecca Romijn, X-Men, Betty), que no dudará en secuestrar a Ellie y Devon con tal de conseguir el virus. Finalmente, El Omen es liberado, pero a su vez Robin es derrotada, confesando que trabaja para alguien, pero no sabe quién es.
Y una vez aquí volvemos al día de hoy, donde el Compra Más está a rebosar de gente temerosa de qué pasará con sus aparatos electrónicos con la liberación al mundo del Omen. Ellie, en casa, esta histérica por que la Navidad sea perfecta para Clara, cosa difícil, por lo que cuenta con la ayuda de Sarah para prepararlo todo. Cuando ésta está a punto de salir de la base con su surtido de artículos navideños, Daniel No Muero Nunca Shaw aparece, recién salido de su prisión, gracias al Omen, para amargarles a todos la Nochebuena.
Secuestra a Sarah casi provocándole la muerte y trata de chantajear a Chuck para que le entregue cierto dispositivo del despacho de Decker, que resulta ser uno de los lugares más seguros dentro de la CIA, si quiere recuperar a su mujer con vida. Con la ayuda de Beckman, tronchantes consecuencias y una aparición especial de Stan Lee, consiguen robar el dispositivo. Mientras, en el Compra Más, Morgan maneja la situación y pone a Jeff y Lester a trabajar en el reconocimiento del Omen, porque no hay que subestimar el poder de los frikis, que llegan a descubrir que el virus únicamente parece atacar a ordenadores del gobierno. Chuck y Morgan llegan a la acertada conclusión de que lo que Shaw pretende es crear y descargarse el Intersect 3.0 borrando todos los datos de la CIA y obligarles así a readmitirle como espía. En cambio, Shaw le dice a Sarah algo muy distinto. Según él pretende matar a Chuck tal y como ella mató a su mujer, y la va a dejar moribunda frente a un monitor mientras ve cómo asesinan a su marido.
Inteligentemente, Chuck le entrega el dispositivo a Shaw, que cuando lo descarga, desactiva el Intersect que ya tenía en vez de actualizárselo y se enzarzan en una pelea mientras Morgan y Casey rescatan a Sarah. Finalmente y con la imprescindible ayuda de Ellie, consiguen vencer a Shaw, volviendo a meterle entre rejas, esta vez (se supone) de por vida.
En el navideño final feliz, el equipo Bartowskison es invitado a volver a la CIA y alabado mundialmente por haber desbaratado el virus (aunque prefieren permanecer en el anonimato), y con los recursos del gobierno consiguen darle a Clara la Navidad soñada de su madre.
Podrían haberlo dejado aquí y haber sido un gran final de un gran capítulo, incluso un perfecto final de serie, pero a falta de 6 capítulos nos abren una puerta que no sabemos a dónde llegará ni cómo lo resolverán de una forma creíble y aceptable en tan poco tiempo sin enredarlo demasiado. Shaw, encerrado, pide un encuentro con Sarah, en el que le recuerda algo que pasó en Hungría. ¿Sabe Chuck algo del bebé?
Apuesto todo a que ni Chuck sabe nada, ni nosotros tampoco, pero que no tardaremos en averiguarlo. Un aplauso para los guionistas, que tras un decepcionante inicio de temporada han culminado con este capítulo que nos ha recordado por qué nos gustaba tanto esta gran serie. Pese al miedo que me daba la vuelta del inmatable Shaw, ha sido un CAPITULAZO. Con mayúsculas.
PD. ¿Y si Abed (Danny Pudi) saliera el Chuck? Sería algo así...
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