Tremendamente aburrido. Con estas dos palabras se puede resumir el tercer episodio de esta temporada de The Walking Dead, extrañamente obcecada en que nada ocurra de tal modo que se pueda llegar a alguna parte. Como siempre, tengo que hablar de las expectativas que tengo de cara a lo que debería suceder (y que podría suceder, no nos engañemos) respecto a lo leído en los cómics. No obstante, desde el primer episodio se podría decir con casi plena rotundidad que todas las tramas que se han abierto esta temporada permanecen en suspenso.
Por supuesto, seguimos en la granja (como debe ser). Por supuesto, Carl sigue enfermo y sus padres, Rick y Lori se pasan eternos minutos del capítulo discutiendo sobre las posibilidades que tienen delante. La madre apunta, después de todo, que tal vez este mundo apocalíptico no sea el mejor lugar para que un niño crezca pero Rick insiste en que deben intentar seguir adelante. Mientras, Shane y Otis son los que llevan la batuta de la acción, aunque no muy intensa, mientras intentan escapar de la multitud de zombis que les tienen prácticamente encerrados. Curiosa la técnica del flashback hacia el final del capítulo, cuando ya sabemos que Otis ha perecido aún cuando le ha salvado la vida a un Shane que a punto estuvo de rendirse. Pero ya sabemos que Shane no es buena gente y al final se nos desvela que utilizó a Otis como cebo para poder escapar (tonto el último). Sin duda, lo más interesante del episodio y lo que más se adapta a nuestras expectativas: por fin vemos a los humanos sobrevivir tan duramente como se esperaba, mostrando sus más oscuras intenciones con tal de permanecer con vida.
Por otro lado, en la granja, vemos como Maggie y Gleen comienzan a congeniar: sí, aquí hay tema, aunque sea entre dos auténticos perturbados. También parece que hay un acercamiento entre Daryl y Andrea, la cual parece que intenta demostrar cuán dura es la pasta de la que está hecha. Y Dale, aunque no lo mira con buenos ojos, parece por fin intentar reconciliarse con la muchacha. Mucho drama y pocas nueces, en realidad.
Sinceramente, espero que en los cuatro episodios restantes de esta primera parte de la temporada ocurra algo, lo que sea. Que por fin se cure el niño, que por fin aparezca la dichosa Sophia y que por fin ocurra en la Granja lo que todos estamos esperando. Por favor.
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A mí también me ha aburrido un poco menos la parte de Shane que si que tenía algo de movimiento!
ResponderEliminarMe gustó mucho la escena de Shane y Andrea. No me importaría que se enrollaran! Saludos! :)
ResponderEliminarpufff lo mejor el final...lo peor el resto...cuantos capitulos se necesitan para contar la desaparicion de la niña y la herida del niño...por dios...si por lo menos le hubiesen puesto un poco de gracia estariamos preocupados por la niña o nos importaria donde esta...aunque a mi sinceramente me da igual. Lo malo es que si quedan cuatro capitulos, y en los tres anteriores no han contado nada, puess...no se si contaran conmigo para la segunda tanda de capitulos la verdad...que mejore por favooor..
ResponderEliminarCarlos, a mí por regla general todo lo que tenga que ver con Shane me aburre así que te puedes imaginar. Pero sí, coincido. Saludos y gracias por pasarte!
ResponderEliminarEspartana, supongo que te refieres a la escena de Daryl y Andrea. A mí me parecería un error enorme. Saludos y gracias por pasarte!
Mayelin, es insoportable la calma que se están tomando para todo esto. Espero que ocurre algo, lo que sea. Saludos y gracias por pasarte!