Una semana más, con sus buenos datos de audiencia de siempre, Modern Family nos trae un episodio entretenido y lleno de humor que a mí me ha conquistado. En su temática familiar, en esta ocasión la comedia nos ofrecía su particular visión acerca de los secretos de familia, y es que hasta con las personas que más queremos tenemos secretos que queremos ocultar. En Virgin Territory, estos secretos, tanto los más recientes como los más antiguos salen a la luz para sembrar un divertido caos y sobre todo muchas dudas entre las familias de Modern Family.
Una comida familiar es el detonante de todos estos secretos (cómo no, siempre ocurren estas cosas en las reuniones en familia) y tras sacar unos cuantos trapos sucios comienzan a destaparse aquellos secretos que serán la principal historia de este episodio. Empezando por Jay, que descubre que nunca hizo un hoyo de un golpe jugando al golf, sino que Mitch fue el que le hizo creer que fue así, lo que nos trae una agradable y tierna trama entre padre e hijo a pesar de que este último vuelve a meter la pata cuando le descubre sin querer el secreto de su padre a sus amigos.
Más divertida es la clase de yoga a la que Claire procura no asistir con Gloria. La colombiana, que cree que Claire no quiere pasar tiempo con ella, descubre que su "hijastra" lo que hace es ir a una galería de tiro a descargar adrenalina y relajarse un poco (atención a la habilidad de Gloria con las armas) después de tener que vivir con cuatro adolescentes; sin duda, una gran revelación acerca de Claire porque es el típico personaje al que te creerías acudiendo semanalmente a clase de yoga y no a disparar con una pistola.
Cam, cómo no, también tiene su parte de protagonismo. Desde la comida familiar le está carcomiendo por dentro la mentira de Claire sobre dónde se encuentra el tupper que le prestó y que aún no le ha devuelto. Tras un aparatoso accidente organizado por los niños (ahora vamos a ello), Cam parece haberse dañado la espalda pero todo es una mentira para poder quedarse solo en casa y poder investigar a fondo todo el hogar en busca de su trozo de plástico. Brutal la escena final en la que sí que tiene un accidente de verdad y Claire le pilla con las manos en la masa.
Los niños, Manny y Luke, lo que en realidad querían era poner en evidencia a Lily, la adorable niña que está en boca de todos y que les ha robado protagonismo (como para no), por eso organizan una elaborada trampa que nadie se cree que pueda haber diseñado Luke, en la que Cam cae a la primera de cambio. Además, Manny vuelve a estar enamorado y Luke le convence para que vaya con un par a declararse a la niña que le gusta. Enorme el momento en el que cogen el coche de Cam y pasan como si fueran raperos ante la ojiplática niña para impresionarla (y la vuelta, marcha atrás, cagados de miedo porque no saben hacer girar el coche). ¡Son Thelma y Louise!
Pero, lo importante del episodio (y lo que le da nombre) es la escena en la que Phil descubre que su preciosa muñequita, Haley, no es vírgen (sorpresa). Tenía que ocurrir tarde o temprano y aunque no ha sido una trama especialmente graciosa es divertida por lo real que parece y por las analogías que utilizan padre e hija para hablar de su situación usando el ejemplo de una muñeca rota. Pero como Phil es un padre molón, lo acepta aunque se quede muy triste con la noticia. Total, Haley iba a decírselo cuando acabara la universidad... y todos sabemos que eso no pasaría nunca.
creo que me fui un poco de espaldas, ya que no esperaba que en sitcom como este trataran ese tema. igual creo que se quedaron cortos, la reaccion de un padre cualquiera seria otra. aunque como dice haley es un buen papa.
ResponderEliminarEn mi caso, creo que ha habido capítulos más graciosos, pero lo que más gracia me hizo fue la frase de Gloria cuando ve cómo se preocupan porque la muñeca de Lily se ha roto '¿Saben lo que es una muñeca en mi pueblo? ¡Una manzana clavada en un tenedor!'
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